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CIUDAD DE MÉXICO, 11 de diciembre de 2016.- La devoción de los peregrinos y su gran esfuerzo por haber llegado a la Basílica de Guadalupe fueron reconocidos por aquellos que, sin ser parte de las cifras oficiales de esta fecha, les regalan comida, agua, fruta, café, cobijas, zapatos y hasta tacos para llegar ante la ‘Patrona de México’.
Son esas personas que, como parte de una manda o de simple altruismo, salen a la Calzada de Guadalupe y de Los Misterios para regalar y reconfortar a los feligreses, quienes llegan exhaustos, con pies destrozados y, algunos, con al menos 50 pesos en la bolsa.
“Tengo 20 años haciendo esto, siempre les hago tortas de jamón, con triple rebanada, con mucho queso, cebolla y jitomate, porque muchas personas tienen hasta un día sin comer, su camino ha sido muy largo y no han comido, también les doy una botella de agua.
“Esta tradición de ayudar a los peregrinos viene desde mi abuelo, él inició esta bonita costumbre y se la empiezo inculcar a mis hijos, porque esa satisfacción de ver el rostro y ese gracias que te dan es muy especial, simplemente no me importa saber cuánto gasté, lo que me importa es que ellos puedan estar satisfechos con nuestras acciones”, dijo Carlos, quien desde hace 20 años se coloca en el cruce de Euzkaro y Calzada de Guadalupe.
Además de tortas, para esta edición se pudo observar taquerías rodantes, esos puestos con sus grandes planchas para asar carne, picar verdura y hacer salsas para darle sabor a los tacos que serán entregados a los creyentes.
En camionetas transportaron la carne y los condimentos, en otra cargaron con la plancha metálica, eran al menos 10 personas, una familia completa que participa porque la Virgen de Guadalupe les otorgó un año de buenas ventas y salud.
“Tenemos dos puestos, en ambos serán alrededor de unos 150 kilos de carne, verduras y mucha salsa, son ellos, los peregrinos los que mantienen esta celebración viva, porque como a ellos la virgencita nos ayudó todo este año, nosotros tal vez no caminemos kilómetros como ellos, pero ayudamos con lo que a nosotros nos da de comer.
“Mi familia está aquí, porque estamos agradecidos, porque llegamos todos al final del año, porque iniciaremos el nuevo y porque nuestro negocio sigue siendo nuestra bendición y la fuente de trabajo de varias familias más que trabajan con nosotros, sinceramente esto es poco de lo que podemos retribuir”, compartió Raúl, que desde hace tres años regala tacos a los creyentes y se ubica a seis cuadras de la Basílica.
Operativo a gran escala y por el récord
En medio de un operativo de grandes dimensiones, miles de feligreses llegaron a la Basílica de Guadalupe para agradecer, un año más, a la Virgen María y para romper el récord histórico de asistencia.
Desde las 5 de la mañana del domingo, los peregrinos arribaron desde diferentes partes del país y pernoctaron en plena calle, con una temperatura de hasta 5 grados centígrados, pero siempre vigilados por los elementos policiacos de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP).
Desde el Eje 2 norte y hasta La Villa, el dispositivo fue colocado en cada esquina, por el aire se vigiló los diferentes accesos al recinto Mariano así como las diferentes estaciones de Metro y Metrobús.
La logística fue encargada al personal de Protección Civil y de la delegación Gustavo A. Madero (GAM) con el objetivo de agilizar el flujo de los feligreses y de cerrar las diferentes avenidas y calles para evitar algún accidente.
Hasta el último corte de cifras, las autoridades reportaron 2.6 millones de personas que arribaron a la Basílica, número que podría aumentar conforme avance la noche y madrugada del lunes 12, lo que pondría a esta edición como la más concurrida en la historia.