Consigue PGJ vincular a proceso a 2 presuntos secuestradores

CIUDAD DE MÉXICO, 5 de marzo de 2017.- Derivado de las investigaciones realizadas por la Procuraduría General de Justicia capitalina, a través de la Fiscalía Especial de Investigación para la Atención del Delito de Secuestro, Fuerza Antisecuestro FAS, el pasado 01 de marzo elementos de la Policía de Investigación (PDI) cumplimentaron dos órdenes de aprehensión contra un hombre y una mujer, de 25 y 21 años de edad, respectivamente, por su probable participación en el secuestro de una persona, ocurrido en la delegación Tlalpan, se lee en un comunicado difundido este domingo.

Al cumplirse los mandamientos judiciales, los imputados fueron trasladados a los Centros de Detenciones del Reclusorio Preventivo Varonil Norte y del Centro Femenil de Reinserción Social Santa Martha Acatitla.

El agente del Ministerio Público aportó los elementos de prueba suficientes para que jueces de Control vincularan a proceso a los indiciados, y les impusieran como medida cautelar la prisión preventiva oficiosa; además, fijaron el plazo de cuatro meses para el cierre de la investigación.

En tanto, la Policía de Investigación (PDI) realiza trabajos de gabinete, campo e inteligencia para localizar a los cómplices en el plagio, a fin de que también enfrenten proceso.

De acuerdo con la carpeta de investigación, el pasado 23 de febrero, el agraviado salió de su domicilio ubicado en la colonia Lomas de Padierna, para dirigirse a su trabajo. En ese momento, fue interceptado por dos hombres armados, quienes violentamente tomaron el control de la camioneta Dodge, tipo RAM, propiedad de la víctima.

Durante el trayecto, el afectado fue cambiado de vehículo y los probables participantes lo obligaron a comunicarse con sus familiares para exigir el pago del rescate. Dos horas después, lo ingresaron a un inmueble al que  llegó la imputada, quien se encargó de cuidarlo y alimentarlo.

Ese mismo día, los secuestradores negociaron con los parientes la liberación del agraviado y exigieron a cambio otro vehículo y dinero en efectivo, además de quedarse en poder de la camioneta Dodge Ram. La operación de entrega se realizó en inmediaciones de la colonia Morelos, delegación Cuauhtémoc; posteriormente, la víctima fue liberada.

Una vez que el ilícito se denunció en la Fuerza Antisecuestro FAS, se implementó el protocolo de actuación que garantiza la integridad física y psicológica de las víctimas directas e indirectas, para brindar asistencia al denunciante y a sus familiares.

Como parte de las acciones de gabinete, los vehículos fueron dados de alta en el sistema de Reporte de Automotores de Procedencia Ilícita (RAPI) de la Ciudad de México, lo que permitió que la noche del 26 de febrero, los arcos detectores de la Secretaría de Seguridad Pública capitalina, identificaran la camioneta de la víctima, en la que viajaban los imputados, cuando circulaban por el cruce de Circuito Interior y calzada Ignacio Zaragoza.

Elementos policiales les marcaron el alto y tras ser detenidos, los indiciados quedaron a disposición del agente del Ministerio Público, quien solicitó a un Juez de Control las órdenes de aprehensión por el delito de secuestro, que fueron otorgadas y cumplimentadas el 1 de marzo.

En entrevista con el representante social, el denunciante identificó plenamente al inculpado como el hombre que tomó el control de su camioneta cuando lo secuestraron, y que éste realizó las llamadas de negociación durante el tiempo que estuvo en cautiverio; mientras que la probable participante abordó el segundo vehículo en el que lo mantuvieron privado de la libertad, encargándose también de cuidarlo y alimentarlo.

A partir de las indagatorias efectuadas por la Policía de Investigación (PDI) se acreditó, a través de las cámaras de videovigilancia del Centro de Control y Comando C2, que el acusado estuvo en el día y lugar en que se cobró el rescate; además, cuenta con un antecedente de investigación en 2010 por el delito de portación de arma de fuego.

De encontrarse penalmente responsables del hecho delictivo, los imputados podrían ser acreedores a una pena de prisión de entre 50 y 90 años.

Durante este año, la Fuerza Antisecuestro ha conocido de cuatro eventos donde las víctimas han sido recuperadas íntegramente y se han desarticulado a dos bandas delictivas.