
Visión financiera
LA PANDEMIA Y LA ECONOMÍA CLXXII…
Las mentiras, agresiones verbales y descalificaciones presidenciales. La devaluación del dólar y el repunte de las remesas.
Existe una campaña de mentiras en torno a la familia del presidente, asegura la vocera presidencial, Ana Elizabeth García Vilchis, y añade que la oposición “y sus medios, están bastante enojados ante la falta de argumentos y, por supuesto, no tienen proyecto. Se dedican a atacar a la familia del presidente, un día sí y el otro también, inventan mensajes falsos, también inventan falsos conflictos de interés, viajes al extranjero…” pero jamás se refiere a los insultos, descalificaciones, denuestos, improperios, mentiras y falsedades que su jefe cotidianamente despotrica en sus soliloquios mañaneros en contra de los ministros de la Suprema Corte de Justicia, legisladores de oposición, instituciones públicas autónomas o legisladores extranjeros, por el simple hecho de emitir sus particulares opiniones.
Hay muchas mentiras y falsedades que afirma el gobierno de Andrés Manuel López Obrador. La primera de ellas, no es que el peso se está revaluando frente al dólar, sino que la economía estadounidense ajustó el valor de su moneda frente a los mercados internacionales. Las consecuencias del desplome varían sustancialmente dependiendo de los distintos actores económicos. Por un lado, a los consumidores latinoamericanos les beneficia –apuntan los expertos– porque muchos de los bienes que se consumen son importados, como, por ejemplo, los autos y los productos tecnológicos.
Al analizar las economías más grandes de la región, los analistas financieros dicen que México es el país donde más se ha depreciado el dólar, seguido por Chile, Colombia y Brasil. El maíz, el trigo, el cacao y otros productos que son de primera necesidad, han tenido alzas superiores al 30 por ciento debido a la depreciación del dólar. Loa analistas prevén que, con el dólar más débil, los precios de las materias primas aumenten, algo que beneficia a los países latinoamericanos. Por otro lado, un dólar más débil significa que habrá una política fiscal y monetaria más flexible en EE. UU., sostiene la BBC Mundo.
Y mientras que el gobierno de López Obrador presume el súbito crecimiento de las remesas, lo que es una desgracia, pues muchos mexicanos emigran a Estados Unidos y Canadá por falta de oportunidades de trabajo en México, desde el inicio de esta administración, las remesas han aumentado un 73.54 por ciento a comparación con 2019; un 28.41 por ciento respecto a 2020; 29.43 por ciento en 2021; y 10.68 por ciento respecto a 2022. Según el Banco de México, durante el mes de marzo las remesas alcanzaron los 5 mil 193.8 millones de dólares, mientras que la recepción se mantuvo por arriba de los cuatro años anteriores.
Aunado a ello, las autoridades fiscales estadounidenses han detectado que los grupos criminales están utilizando el sistema de envío de remesas para “lavar dinero” proveniente de la venta de drogas y ya investigan a varias empresas mexicanas.
También, el mundo atraviesa por uno de los momentos más tensos en relación con el costo de los combustibles en los últimos años. Las tensiones políticas en Europa han llevado a la gasolina a alcanzar costos drásticamente altos en todo el mundo, precios del petróleo suben, aunque en México gracias al estímulo fiscal a la gasolina Premium del 100 por ciento ha logrado controlarse.
Rogelio Ramírez de la O, secretario de Hacienda y Crédito Público (SHCP), al entregar el Paquete Económico 2023, que incluyó la iniciativa de la Ley de Ingresos de la Federación, el Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) y los Criterios Generales de Política Económica (CGPE), estimó que el tipo de cambio terminaría 2023 en un nivel de 20.9 pesos por dólar. Las autoridades fiscales señalaron que el dato consistente con los fundamentales macroeconómicos del país, y en particular con el comportamiento reciente de los flujos financieros y la posición monetaria de México y Estados Unidos.
La presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Norma Lucía Piña Hernández, recibió la semana pasada un premio de derechos humanos por parte de la Asociación Internacional de Mujeres Juezas. Al respecto, al emitir su opinión, López Obrador dijo: “esos premios se pueden conseguir en la Plaza de Santo Domingo o también en el Time. Acuérdense, esta revista famosa internacional que decía: ‘El economista del año’, siempre era un secretario de Hacienda de México de la época del saqueo, de la corrupción, los presidentes de México de aquél entonces; salían en la portada. Premios a Krauze en la monarquía española, casi una vez por año”. Y también aprovechó para arremeter en contra del rector de la UNAM, Enrique Graue. “Yo no sé por qué se van a allá (a España), o a vivir o a recibir premios”, pero casi se muerde la lengua cuando su propia esposa ha viajado a ese país con esos mismos propósitos, inclusive la envió para entregar una carta al rey de España.
Luego dijo que sus hijos son acosados por los medios de comunicación y arremetió en contra de Carlos Loret de Mola. Tanto él como su vocera Ana Elizabeth García Vilchis aseguran que se dedican a acusar y a hostigar a la familia del presidente y a difamarla con mentiras y calumnias. Incluso, la vocera utiliza el término infodemia sobre las noticias falsas acerca de la migración. El término infodemia se emplea para referirse a la abundancia de información sobre un tema concreto. El término se deriva de la unión entre la palabra información y la palabra epidemia. Se relaciona con conceptos similares como fake news o infoxicación, en la medida que la cantidad y exposición de estos se intensifican. La infodemia es considerada como una transgresión ética al buen periodismo científico. Pero la palabra “infodemia” no existe en el diccionario de la Real Academia de la Lengua Española.
Y las faltas ortográficas en las conferencias de prensa mañaneras se auto perdonan, al fin y al cabo, lo que importa es el amiguismo, ser incondicional y lambiscón y no ser una persona culta y preparada. Por el bien del país, esperemos que esto cambie.