Desde el Cuarto de Guerra
La contienda por la presidencia y capital del país ya comenzó. La mentira como forma de gobierno. El nebuloso caso de unomásuno.
Se inició formalmente el proceso electoral de 2024 con el arranque de las precampañas. Las tres personas que hasta ahora se han apuntado para aspirar a la presidencia de la República, Claudia Sheinbaum, Xóchitl Gálvez y Samuel García, podrán recorrer el país de forma legal, sin limitar sus discursos o las personas a las que se dirigen
Claudia Sheinbaum Pardo, será la abanderada de Morena, Partido Verde Ecologista de México y Partido del Trabajo, tras haber sido electa como coordinadora nacional de la llamada “Cuarta Transformación”, cargo partidista que creó Morena para definir a su eventual candidato presidencial.
Xóchitl Gálvez arrancará de la mano del Partido Acción Nacional (PAN), del Partido Revolucionario Institucional (PRI) y del Partido de la Revolución Democrática (PRD), tras haber sido elegida como coordinadora del Frente Amplio.
Mientras que Samuel García se apuntó en los últimos días para subirse a la contienda presidencial por Movimiento Ciudadano, para lo que pidió licencia como gobernador de Nuevo León por seis meses, del próximo 2 de diciembre hasta el 2 de junio que son las elecciones.
Ahora, comienza la guerra de encuestas, con las que Claudia Sheinbaum, Xóchitl Gálvez y Samuel García, como precandidaturas únicas de sus respectivos partidos y coaliciones, podrán comenzar a posicionarse ante la ciudadanía antes de aparecer en la boleta y en la que habrá muchos “chapulines” y “aspiracionistas” que pretenderán colarse en las listas para diputados y senadores, pero con un común denominador: están ausentes y absolutamente lejanos de los ciudadanos y esperemos que no voten por ellos, aunque algunos llegarán por la vía del “dedazo”.
En cuanto a la capital del país, el oficialismo postuló a la ex alcaldesa de Iztapalapa, Clara Brugada, con claros antecedentes perredistas y que perdió la elección interna, por la vía de las encuestas por más de 12 puntos frente a Omar García Harfuch quien la rebasó en todas las encuestas del oficialismo, pero ni Claudia Sheinbaum con todo su “bastón de mando”, se pudo imponer a la voluntad de López Obrador.
La oposición constituida en el llamado del Frente Amplio por la Ciudad de México, postuló al panista Santiago Taboada, ex alcalde en Benito Juárez, como “candidato de unidad”, no obstante, el berrinche y la actitud mezquina de los priistas Adrián Rubalcava y Sandra Cuevas, alcaldes de Cuajimalpa y Cuauhtémoc, quienes en los hechos y a los resultados de encuestas, tienen pocas posibilidades de ganarle la designación a Taboada, al igual que los candidatos perredistas. Pero tienen razón en protestar por la forma en que el dirigente nacional del PRI, Alejandro Moreno, “Alito”, los bajó de la contienda. El tal “Alito” sigue llevando al otrora partido poderoso a la tumba, si no es que ya está. En fin.
Y pasando a otro tema de importancia, el 14 de noviembre pasado, se cumplieron 46 años, de que se fundó el diario unomásuno. Pero también, se cumplieron 21 años de que los trabajadores estallaron una huelga y aunque ya ganaron el litigio, los 350 trabajadores y sus familias no han podido cobrar lo que les corresponde ya que un dirigente de la CTM no ha vendido las propiedades que las autoridades laborales adjudicaron a éstos y que a precios actuales le permitirían a cada familia recibir un promedio de un millón de pesos. Algunos de los afectados ya comenzaron a demandar por la vía penal al tal Chágary por los delitos de fraude y abuso de confianza. No es justo que pase tanto tiempo para resolver este caso y nuevamente el gobierno morenista “se lavó las manos”.
Ahora que se conoció que Arturo Zaldívar Lelo de la Rea renunció como ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación para integrarse al equipo de Claudia Sheinbaum. Hay, varias cosas que analizar. La primera de ellas, es que López Obrador no gana aparentemente nada con la salida adelantada de Zaldívar y pierde porque el cambio requerirá una tortuosa negociación con la oposición o una imposición bastante criticable.
Lo que pretende Zaldívar consiste en ofrecerle a Claudia Sheinbaum ser su abogado y convertirse de facto, en uno de los hombres más poderosos en el próximo sexenio, pues pretende ser quien redacte, diseñe y negocie las estrategias legales de la presidencia. Esta es una posición extremadamente poderosa pues todo abogado sabe que, con frecuencia, un cambio menor en un fraseo, palabra o hasta una coma de una ley, pueden transformar por completo su alcance e interpretación. El poder del consejero legal, en una presidencia litigiosa y reformista se vuelve inimaginable.
López Obrador explicó que no fue a recorrer la zona cero de Acapulco porque hubiera puesto en riesgo su investidura presidencial. Nuevamente vuelve mentir. Entonces ¿no es cierto, como él dice que el pueblo no es tonto y lo que lo ama? … si eso fuera cierto ese pueblo se hubiera desbordado amorosamente en torno a él. Pero no. Ese pueblo le hubiera mentado la madre, porque la ayuda no llegó y ni las autoridades estatales y federales se han parado en las comunidades que todavía están aisladas, destrozadas. No es cierto que se hubieran colado a 10 o 20 “provocadores” dedicados a insultarlo, arropados por la televisión. Hubieran sido mucho más los que lo insultaran y les sobran motivos para hacerlo. Ya hasta las listas de muertos y desaparecidos quieren esconder. ¡Carajo!
En sus palabras: “Si voy, me van a ir a ver muchos, porque me quieren, como yo los quiero. Pero me van a mandar a 10, 20 provocadores con la televisión. Entonces, no puedo exponerme, no es Andrés Manuel; si se tratara de Andrés Manuel, respondería yo como cuando estábamos en la escuela: ‘A la salida nos vemos’. Pero soy el presidente de México, tengo que cuidar la investidura presidencial. No puedo permitir que nadie me ningunee”. Qué incongruencia.
Extraña su investidura presidencial la que se abrillanta con aplausos en Badiraguato, capital simbólica del narco en México, y, en cambio, puede rasgarse por 10 o 20 pelafustanes que le puedan gritar impertinencias por la falta de atención ante la devastación que dejó un huracán sin precedentes ha destruido sus casas y su patrimonio. Es más, su ciudad.