Visión financiera/Georgina Howard
Las encuestas y sondeos del pulso de la nación, tomados de diversos medios, ponen a los mexicanos en el centro del debate. Por ejemplo, en estados como Oaxaca, Puebla, Michoacán, Guerrero y Guanajuato, hay extrema preocupación por lo que pudiera ocurrir con las remesas y las deportaciones que ha anunciado el nuevo gobierno estadounidense.
Las economías de esos estados dependen muchísimo de ello. Si las remesas no llegan y las deportaciones son masivas, la situación social en dichas entidades pudiera agravarse.
Otros sectores de la población, fundamentalmente urbanos, están preocupados porque no vayan a perder sus empleos, que se quede sin control la inflación, que suban los precios de los alimentos y servicios públicos, que vayan al alza los asaltos callejeros y que se recrudezca la violencia.
Todos, sin embargo, de acuerdo a las diversas encuestas, manifiestan que desean una economía que crezca, que se frene la violencia y la inseguridad, que se acabe con la corrupción y que se le cierre la puerta la impunidad. Lo que es un hecho, en que la mayoría espera que los funcionarios federales, estatales y municipales estén a la altura de las circunstancias, al igual que los legisladores federales y locales, que tienen fama de ineficientes y abusivos con el presupuesto, puesto que se autorizan bonos millonarios, y hagan eficientemente su trabajo.
En los últimos días se han publicado diversas encuestas de opinión y las respuestas ciudadanas no son diferentes, si acaso varían, en los porcentajes. Los temas son los mismos, con algunos matices.
Por ejemplo, la pretensión del presidente electo de Estados Unidos ha generado entre los mexicanos una percepción negativa en la relación entre México y el país vecino del norte. Según una encuesta telefónica a mil personas, realizada por el Centro de Estudios Sociales y de Opinión Pública de la Cámara de Diputados sobre migración, el 82 por ciento considera que la construcción del muro es una agresión hacia México, en tanto que el 15 por ciento rechaza que sea un ataque.
Según el sondeo efectuado entre el 8 y el 10 diciembre de este año, a mil personas mayores de 18 años en el país, 8 de cada 10 mexicanos advierten que el muro en la frontera con México no frenará las intenciones de los migrantes que buscan el sueño americano, un 10 por ciento señala que si habrá un freno al paso de ilegales. Indica también que 2 de cada 3 encuestados avizora que la presidencia de Donald Trump afectará “mucho” a la economía mexicana, 11 por ciento prevé que afecte algo y 12 por ciento ve consecuencias mínimas.
La mayoría de ciudadanos desaprueba gestión de autoridades federales, estatales y municipales. En el estudio del Centro de Estudios Sociales y de Opinión Pública de la Cámara de Diputados, el 48 por ciento de los encuestados considera que durante el gobierno del presidente Enrique Peña Nieto se incrementó la migración hacia Estados Unidos en comparación con los gobiernos anteriores, 35 por ciento cree que permanecerá igual que antes y 8.3 afirma que disminuyó.
La encuesta también contempla un apartado donde los ciudadanos evalúan a las autoridades de distintos ámbitos de gobierno: al Presidente de la República, sólo 24 por ciento aprueba su trabajo, 66 por ciento lo desaprueba y 7 por ciento no sabe. Los diputados federales tampoco pasaron la prueba ya que 67 por ciento reprueba su trabajo y solamente el 8 por ciento lo avala.
En el ámbito de las entidades federativas la calificación ciudadana no les favorece.
Para los gobernadores y Jefe de Gobierno, 55 por ciento de los ciudadanos desaprueba su desempeño y 34 por ciento lo respalda. En el caso de presidentes municipales o delegados: 40 por ciento avala su trabajo, 47 por ciento lo desaprueba.
Llama la atención, sin embargo, que los resultados de la tercera Encuesta de Calidad e Impacto Gubernamental (Encig), que dio a conocer en marzo pasado el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), mostraron que apenas 43.5 por ciento de los mexicanos están satisfechos con los servicios públicos, mientras la corrupción es el segundo problema que más les preocupa, sólo superado por la inseguridad.
En los trámites, pagos y solicitudes de servicios públicos realizados por los mexicanos, así como otro tipo de contactos que tuvieron con servidores públicos de áreas urbanas durante 2015, “la tasa de prevalencia de corrupción fue de 12 mil 590 víctimas por cada 100 mil habitantes, mientras la incidencia fue de 30 mil 97 actos de corrupción por cada 100 mil habitantes”, informó al dar a conocer la encuesta levantada el año pasado.
El 66.4 por ciento de la población colocó a la inseguridad en el primer lugar de sus preocupaciones y, cuestionado sobre cuál era el segundo problema que más les preocupa, 50.9 por ciento de los entrevistados señalaron que la corrupción. La encuesta detalla que el índice de satisfacción que tiene la población sobre la policía fue de apenas 25.3 por ciento y la gente más expuesta a la corrupción fue la que tuvo que tratar con funcionarios de seguridad pública, pues padecieron dicho problema más de la mitad (55.2 por ciento), seguidos de quienes hicieron trámites con el Ministerio Público (23.7 por ciento).
En dicha encuesta, el estado de México duplicó la tasa de incidencia nacional en corrupción, al registrar 62 mil 160 casos por cada 100 mil, y fue seguido de Sinaloa con 58 mil 232, Chihuahua con 36 mil 472, Sonora con 33 mil 256, y Morelos con 29 mil 740. En cuanto a las víctimas, Morelos registró la mayor tasa de prevalencia en corrupción con 20 mil 92 víctimas, seguido de Sinaloa con 18 mil 144, Chihuahua con 17 mil 621, Michoacán con 16 mil 321 y Ciudad de México con 16 mil 167.
Por lo pronto, hay que recordar que el año entrante se inicia el año electoral y la mayoría de los mexicanos no creen en los partidos políticos, es más, los consideran una carga presupuestal innecesaria.