
De frente y de perfil
La Honestidad “Valiente”, la Corrupción, las Campañas y el malestar social
Tengo una amiga, indígena, que concluyó sus estudios de preparatoria en Ayutla de los Libres, Guerrero. Su familia es muy pobre y la ilusión de ella, es ingresar a la Escuela de Enfermería de la Armada de México.
Pero como su familia no tiene recursos, se tuvo que venir a vivir con una de sus tías a Valle de Chalco y, por ahora, trabaja en una zapatería del mismo Chalco, donde trabaja de lunes a domingo más de ocho horas y le pagan 800 pesos semanales.
A pesar de lo poco que le pagan ella está ahorrando para cumplir con sus sueños.
Tengo otra amiga que apenas se divorció, estudio posgrado, domina varios idiomas y tiene al menos cinco meses buscando empleo decoroso y bien renumerado. No lo ha encontrado a pesar de su perseverancia. Conozco también a un joven que estudió comercio exterior domina inglés y francés y, sin embargo, no tiene empleo.
Estos tres ejemplos contrastan severamente, con los recientes casos de corrupción. Los Duarte, los Yarrington, los candidatos de Morena, el inmoral de Yunes, los Murat, etc., cuyos actos deshonestos solamente han venido a generar un grave malestar social, pues hay miles de mexicanos buscando tener un empleo digno y bien pagado y no lo encuentran, mientras estos especímenes malditos se roban los recursos públicos de manera inaudita.
Los argumentos de Andrés Manuel López Obrador sobre “la mafia del poder”, contrastan con su “honestidad valiente”, permitiendo que sus testaferros acepten dinero ilícito tan burdamente que se dejan filmar, tal y como ocurrió con René Bejarano –algunos le dicen René “El Marrano”—con el querido de Rosario Robles, el argentino Carlos Ahumada.
Pero desde luego los críticos de López Obrador, como los presidentes nacionales del PRI y del PAN, Enrique Ochoa y Ricardo Anaya, respectivamente, no tienen calidad moral ni tampoco ningún tipo de argumento para cuestionar a los ex gobernadores y gobernadores ratas e inmorales surgidos de sus filas, ni mucho menos al tabasqueño. Tampoco los perredistas y nos extrañe que a la brevedad el ejecutivo morelense, Graco Ramírez Garrido Abreu o el ex futbolista Cuauhtémoc Blanco, sean los nuevos inquilinos en un reclusorio.
Miles de mexicanos manifiestan diariamente en las redes sociales su malestar por la falta de calidad moral, prestigio y liderazgo de esta clase política que nos gobierna y cuestionan también a una prensa que solapa todas las inmundicias del poder público y festeja la gran cantidad de sandeces que dicen los legisladores federales. En fin.