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CIUDAD DE MÉXICO, 8 de diciembre (Quadratín México).- Reconocido por temas de éxito como “Azul”, “Lloran las rosas” y “Volver a amar”, el cantante mexicano Cristian Castro cumplirá este sábado 38 años de vida inmerso en la producción de su nuevo álbum “Primera fila”, en el que comparte créditos con su famosa madre Verónica Castro.
Castro, quien también se ha desenvuelto como actor en melodramas como “El derecho de nacer” y “Mi segunda madre”, grabó hace unos días el mencionado disco, el cual es un trabajo en vivo en el que reunió lo mejor de su discografía para interpretarla ante verdaderos fans en una sesión íntima y emotiva realizada en Los Ángeles, California.
En esta producción musical, el también hijo del actor y comediante Manuel “El Loco” Valdés se hizo acompañar de diversos artistas invitados, entre los que destacan el dueto Ha*Ash, con el que canta “Te amaré más allá”, y con el grupo Reik, en el tema “Es mejor así”.
Durante la grabación de la placa que saldrá a la venta a principios del próximo año y que contendrá 26 temas, el cantante interpretó a dueto con su madre “Aprendí a llorar”, corte que inmortalizara Verónica Castro gracias al melodrama “Los ricos también lloran” y el tema “Ven”, que se desprendió de la novela “El derecho de nacer”.
Con este trabajo Cristian Castro también festeja dos décadas de trayectoria, durante los cuales ha publicado “Lo mejor de mí”, “Amar es”, “Días felices” y “El culpable soy yo”, entre otros.
Cristian Sáenz Castro nació el 8 de diciembre de 1974 en la Ciudad de México; es hijo de la cantante y actriz Verónica Castro, así como del actor y comediante Manuel “El Loco” Valdés, lo que para él significó ser perseguido desde pequeño por las cámaras.
Sus primeros pasos por el mundo del espectáculo los dio como intérprete del tema “Gallito feliz”, bajo la guía de su madre, abuela y tía, con cuyo impulso logró a sus apenas siete años ser locutor de radio y tener su propio programa, “La hora de Cristian”.
Posteriormente participó en el Festival “Juguemos a cantar” y en la obra musical “Mame”, al lado de la actriz Silvia Pinal. Esta fue su primera experiencia actoral que le dio reconocimientos.
A los 15 años debutó en el Festival de la OTI con el tema “16 diciembres” y participó en su faceta como actor en la telenovela “Las secretas intenciones” (1993). Anteriormente ya había actuado en “El derecho de nacer” (1981), al lado de su madre.
En 1991 grabó su primer disco titulado “Agua nueva”, el cual incluyó la canción “No podrás”, misma que se convirtió en un himno en las discotecas y un éxito a nivel internacional.
Luego editó los discos “Un segundo en el tiempo” y “El camino del alma”, viajó y ofreció conciertos por América Latina, donde acumuló varios reconocimientos, entre ellos el premio Lo Nuestro a la Mejor Canción, en 1994, y posteriormente como Mejor Artista Masculino, en 1996.
Ese mismo año lanzó “El deseo de oír tu voz”, el cual incluyó temas como “Amarte a ti”, “Amor” y “Morelia”, tema principal de la telenovela del mismo nombre.
En 1997, grabó el álbum “Lo mejor de mí”, del cual se desprendieron los temas más solicitados del mismo: “Lloran las rosas”, “¿Después de ti qué?” y “Si tú me amaras”.
Dos años después, el cantante sacó “Mi vida sin tu amor”, que contenía los éxitos “Volver a amar”, “Por amarte así” y “Alguna vez”.
En 2002 decidió radicar un tiempo en Nueva York, Estados Unidos, para estudiar cine, ya que uno de sus anhelos es dirigir una película. También un tiempo radicó en Fisher Island, Miami, lugar que eligió para independizarse de su familia.
Ese mismo año grabó el disco “Re-mixes”, en el cual se incluyeron varios éxitos como “Lloran las rosas”, “Por amarte así”, “Alguna vez”, “Si tú me amaras”, “Volver a amar”, “Más y más”, “¿Después de ti qué?” y “Tu sombra en mí”.
Al año siguiente grabó “Azul”, cuyo sencillo homónimo se convirtió en una de las favoritas del público. Este material contó con temas como “Yo quería”, “Nuestro amor”, “Lloviendo estrellas”, “Los amores” y “Si pudiera”.
Así fue que la popularidad del artista mexicano sobrepasó fronteras, al grado de alternar con uno de los grupos de pop más importantes de Europa y Estados Unidos: Westlife.
En 2002 salió el disco “Cristian, grandes hits”, el cual incluyó 16 temas como “Verónica”, “Cuando me miras así”, “Miedo”, “Pasión”, “Escondidos”, “Soledad” y “Ella”, por citar algunos títulos.
El escándalo también fue parte de su vida durante ese año, ya que las chilenas Carola Julio y Titi Ahubert señalaron que Castro era bisexual; sin embargo, ese comentario fue desmentido por las propias conductoras de televisión, quienes se disculparon con él.
En 2003, el cantante convocó en el Zócalo de la Ciudad de México a miles de seguidoras en un concierto gratuito, y ese mismo año se casó por el civil con la paraguaya Gabriela Bo, heredera de una de las fortunas más importantes de ese país.
También en ese año salió a la luz el álbum “Amar es”, del cual se desprendió el sencillo “No hace falta” y cuyo video también estuvo incluido en dicha producción y en el que la protagonista fue su entonces esposa.
Sin embargo, la unión de la pareja terminó en 2004, año en que Cristian se volvió a casar por medio de un rito judío con su antigua novia, Valeria Liberman, pero en esa ocasión su madre, la cantante Verónica Castro, no estuvo presente.
En 2005 nació su hija Simone, ocasión en la que se reencontró con su padre Manuel “El Loco” Valdés.
De esta forma, tras diversos momentos que han hecho que Cristian viva unos “Días felices”, el cantante nombró así su siguiente material discográfico.
En 2006, Castro realizó una gira por América Latina con la promoción de este álbum, además de que fue blanco de los medios de comunicación debido a un distanciamiento con su madre, situación que el cantante reconoció de manera abierta.
En 2007, luego de que el intérprete y su esposa, la abogada argentina Valeria Liberman, estuvieron a punto de divorciarse en agosto, Cristian se convirtió en padre, por segunda ocasión, de un niño que nació en Miami, Florida.
En ese año el cantante de “Azul” sacó a la venta su disco “Indomable”, el primero de género ranchero y mariachi, producido por Pedro Ramírez y Vicente Fernández.
Este disco, el cual vendió más de 12 mil copias, contiene canciones como “No volveré”, “Tu retirada”, “Si acaso vuelves”, “El indomable” y “No soy monedita de oro”, entre otras.
Por este álbum, Cristian recibió el Grammy Latino en la categoría Mejor Álbum Ranchero y estuvo nominado junto a Pepe Aguilar, con “Enamorado”; Pedro Fernández, con “Escúchame”, y Vicente Fernández, con “La tragedia del vaquero”.
En 2008, recibió el galardón de Máximo Orgullo Hispano, otorgado por Las Vegas International Press Association, por su trayectoria artística y por la venta de millones de discos en esa ciudad.
En 2010, presentó el disco “Viva El Príncipe”, el cual es un álbum homenaje al “Príncipe de la Canción”, José José, y en el que se incluyen temas como “Lo pasado pasado”, “La nave del olvido”, “Amor amor” y “Lo que no fue no será”, con el cual recorrió gran parte de América Latina con el espectáculo homónimo.
Durante 2011, Cristian Castro lanzó al mercado el segundo volumen de su disco homenaje al legendario intérprete José José, bajo el título “Mi amigo El Príncipe”.
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