Cuentahabiente con fuertes sumas de dinero, presa fácil y en el limbo

CIUDAD DE MÉXICO, 6 de abril de 2019.- Los robos con violencia son de los más cometidos diariamente, ya sea a transeúnte, a negocio o cuentahabiente, este delito es uno de los que mes a mes cuenta con las tasas más altas y de los menos denunciados.

La dificultad para encontrar a los delincuentes, el tiempo que tardan las autoridades en atender a la víctima y lo tedioso de los trámites han llevado históricamente a las víctimas de este delito a no denunciar.

Este tipo de robo se comete en muy poco tiempo, lo que dificulta a veces que testigos o la propia víctima pueda recordar las características físicas de quien lo comete, convirtiendo esto, en otro factor por lo que no se denuncia.

En este tipo de ilícito, la mayor cantidad de las carpetas de investigación que se inician es únicamente para soportar el hecho ante compañías telefónicas, pues algunas de estas brindan un seguro y requieren de la querella.

En los últimos meses, el robo a cuentahabiente también ha ido en aumento, al grado de que la policía capitalina ha desarrollado diversas acciones para prevenirlo, no obstante, este sigue sucediendo.

Desde presencia en las sucursales bancarias, hasta acompañamientos personalizados, los uniformados han implementado técnicas para persuadir a los delincuentes, quienes cada vez consiguen maneras más elaboradas para llevar a cabos sus planes.

De acuerdo con la percepción de los ciudadanos, una colusión entre el personal que trabaja en las sucursales bancarias y quienes gustan de tomar los bienes ajenos, es en gran medida lo que propicia este delito, que cada vez es más común.

Esto debido a que los delincuentes siguen únicamente a quienes portan cantidades grandes de dinero, como si pudieran adivinar, indica la percepción del delito, lo que lleva a señalar a los empleados de los bancos a quienes comparten esta información con los delincuentes en cuestión de segundos.

Y es que, dicen, no necesariamente el atraco se consume al exterior de la sucursal bancaria, también ocurre en el trayecto de la misma al destino de quien retira el dinero; en muchos casos, la violencia utilizada ha derivado en la muerte de la víctima.

Este delito ha llevado a las autoridades a buscar alternativas para prevenirlo, desde aumento de vigilancia, detección y detención de posibles asaltantes, hasta un programa de acompañamiento policial.

Este ultimo diseñado como estrategia para prevenir el delito, pues los ladrones difícilmente se acercarán a la víctima si esta va custodiada por elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana.

No obstante, en redes sociales fue difundido un video en donde se observa como delincuentes atacan a una persona para robarle una fuerte suma de dinero justo en el momento en que los uniformados la dejan en su destino.

Esto llevó a la dependencia a entablar una investigación a fondo contra los mismos elementos a quienes la opinión pública acusó de manera inmediata por su complicidad debido a la filtración de información delicada.

En el video se observa cómo varios delincuentes se encuentran ya listos para atacar a la persona que portaba un maletín con una fuerte suma de dinero que recién había retirado de la sucursal.

Una patrulla de la policía capitalina aparece en la imagen captada por cámaras de seguridad de los mismos vecinos, acto seguido, los delincuentes preparan su golpe mientras que el cuentahabiente no sospecha nada.

Este baja de la patrulla, misma que se arranca apenas el ciudadano pone los dos pies en el pavimento, momento que aprovechan los maleantes para arrebatarle el maletín y escapar, todo en menos de 30 segundos.

Por estos hechos, la Procuraduría General de Justicia de la Ciudad de México inició ya una carpeta de investigación en la Fiscalía para la Investigación de los Delitos Cometidos por Servidores Públicos en agravio del cuentahabiente desapoderado de dinero en la colonia Moctezuma, en la Venustiano Carranza.

De acuerdo con las primeras indagatorias, las autoridades establecieron que la víctima solicitó apoyo a elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana para que lo escoltaran del banco a un domicilio con el dinero.

 Una vez que llegó a su destino, el agraviado descendió de la patrulla y los servidores públicos se retiraron, pero en ese momento fue interceptado por un sujeto que le arrebató el dinero que llevaba en un portafolio azul, en tanto un copartícipe lo amenazó con un arma de fuego para después huir.