Deadline/Víctor Hugo Arteaga

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Vaya, vaya, vaya. Al parecer la andanada enviada la semana pasada desde la Presidencia de la República y la Secretaría de Gobernación en contra del líder nacional del PRI, Alito Moreno, no les dio los resultados esperados.

Hablemos en términos de pelota, de esa que le gusta al Presidente. Básicamente sus peloteros y su novena (Morena) le platicaron una serie muy diferente a la que se dio el domingo en el “diamante” electoral.

Su “Manager” Mario Delgado presentó en su “line up” a seis “lanzadores” con los que esperaba sacar las escobas y realizar una “limpia” ayer ganado los seis encuentros que se disputarían en Aguascalientes, Durango, Hidalgo, Oaxaca, Quintana Roo y Tamaulipas.

Pero como diría Yogui Berra: Esto no se acaba hasta que se acaba o caiga el out 27 o más si se requieren “extra innings”.

No contaban con que dentro del campo habría otra novena, que sin tener los bates de madera de caoba, las manoplas de piel de ternera, los mejores uniformes, gorras con la mejor lona, “spikes” con la última tecnología para correr, se le pondrían al tú por tú y le dieran una serie que terminaría 4-2 y si me apuran un poquito, un juego que no ha terminado en Tamaulipas que podría poner la serie empatada 3-3.

De no ser por dos “esquiroles”, uno en Hidalgo llamado Omar Fayad y otro en Oaxaca, Alejandro Murat, que decidieron pasarle el “libro de jugadas y señales” a los guindas, las cosas se hubieran puesto color de hormiga para la Trasformación de Cuarta.

De hecho ese par de “esquiroles”, al parecer, ya han negociado sus contrataciones para representar al cuadro “guinda” en alguna de sus oficinas en el extranjero, debido al miedo que les da saber que el “Alto Comisionado” podría ir por ellos y suspenderlos por sus malas acciones al frente de las sucursales estatales.

La “limpia” que anunció el domingo por la mañana Mario Delgado, en la que aseguró que le pasaría por encima a la novena de la “Oposición”, se le complicó de última hora.

Hay a quienes les gusta analizar los “encuentros” al revés tomando el calendario de antaño a 2018, cuando en realidad tendrían que hacer sus análisis y proyecciones conforme a la nueva temporada desde que los “guindas” ocupan el trono de esta liga.

Y en ese sentido se vuelve interesante cómo con todo el aparato, todos los presupuestos y grandes contrataciones para llevarse el “Campeonato”, habría qué analizar las cifras desde el 2018, cuando la novena “tricolor” ha crecido a razón del 17.8%, los “albiazules” 18.3, mientras que los “guindas” cayeron de un 31.3 a un 34% antes de las cifras del domingo.

Antes de ayer domingo, los priístas habían aportado, en las elecciones previas, a la coalición 5 millones 989 mil 69 votos, mientras que los panistas sumaron 5 millones 116 mil 87 sufragios y los perredistas aportaron 1 millón 543 mil 78 votos.

Por eso el análisis presentado por el “Manager” Mario Delgado al dueño del equipo, Andrés Manuel López Obrador y al gerente general de la novena, Adán Augusto López, de que habría “limpia” y “barrida”, pues simplemente fue mal calculado.

Yo veo “señales equivocadas” de todos los “coaches” que tiene AMLO a su alrededor, diciéndole que el PRI, por ejemplo, está a punto de morir y que no tarda en desaparecer en la liga mexicana de la política.

Si se analiza que en el año 2018, cuando llegó AMLO con su efecto demoledor, el PRI de Alito Moreno tenía 45 diputaciones locales, se debería considerar que en las elecciones del año 2021 lograron ascender hasta 70 congresistas federales, lo que significa, si Pitágoras no miente, que hubo un crecimiento del 46.4%.

El promedio de edad de ese equipo en San Lázaro pasó de 54 años de edad en 2018 a 46 en el 2021 y con 24 legisladores de menos de 40 años, lo que indica que el “cuadro tricolor” se está renovando rumbo a la “Serie Mundial Mexicana” del 2024.

Por eso los “playoffs” de ayer domingo en seis estados del país, si bien suenan estruendosos para el equipo que marcha en lo más alto del “standing”, como diría la que sale en las tempraneras, “no es falso, pero es engañoso”.

A los que pensamos y hacemos analítica de lo que sucede en México, y somos cada mas, no se nos olvida que Morena mantiene un promedio de 83 asesinatos cada 24 horas, además claro, de la invisibilización que hace el “dueño de la novena” de los 3 mil feminicidios que se suman desde que el tomó el control de la Liga Mexicana Política.

Tampoco se nos olvida, ni pasan desapercibidos, que 7 de cada 10 delitos sexuales que se dan en este país, son contra niñas, niños y adolescentes, mientras que la tasa de violaciones ha crecido 28.7% desde el 1 de diciembre del 2018.

Desde que AMLO vive en Palacio Nacional, México logró posicionar a Zamora (gobernada por el PAN), Ciudad Obregón (Morena), Zacatecas (Morena), Tijuana (Morena), Celaya (PAN), Ciudad Juárez (Morena), Ensenada (Morena) y Uruapan (Morena), como 8 de las 10 ciudades más violentas del mundo.

En procuración de justicia, los “guindas” de AMLO tienen un 94% de delitos sin resolver y sólo en los últimos tres años han desaparecido 44 mil personas en todo el país, mientras que 36 periodistas han sido asesinados, así como 92 defensores de derechos han sido perdido la vida.

Así que con base en esos análisis y cifras, muy seguramente ayer domingo muchísimos electores en Aguascalientes, Durango y Tamaulipas, decidieron hacerle un fuerte llamado a la Transformación de Cuarta de cara a la serie que se jugará en el 2024 en México y que traerá a otro dueño de “equipo” para jugar las siguientes series hasta el 2030.

De esta forma el “playball” para la siguiente serie del próximo año en el Estado de México y Coahuila se ha cantado. Las novenas comenzarán sus campos de entrenamiento a partir de este lunes, buscando a los mejores exponentes, que les permita ser competitivos.

Unos buscarán adueñarse por completo de la Liga Mexicana de la Política, mientras que el otro bando, porque sin duda alguna ayer se demostró que no hay una tercera vía, buscará darle otro dolor de cabeza a los “guindas”, que buscan instaurar el monopolio y desaparecer a todos los rivales.

El autor de la columna es Premio Nacional de Periodismo 2016 por el Reportaje de Investigación de Las Empresas Fantasma de Duarte.