Libros de ayer y hoy/Teresa Gil
El presidente Andrés Manuel López Obrador fue enfático en defender el Estado Laico, pues dijo que modificar este principio no ayudará, “al contrario, ya en su momento hubo confrontación…eso motivó hasta una invasión extranjera. No nos metamos en ese campo».
Además recordemos que el primer mandatario ha colocado como uno de los ejemplos y pilares de este gobierno a Benito Juárez; y la laicidad del Estado mexicano es uno de los más grandes compromisos y proyectos a lo largo de toda su vida política; así lo demostró en 1844 cuando luego de ser nombrado secretario de Gobierno en el gabinete del gobernador de Oaxaca, Juárez presentó su renuncia ante el intento de las autoridades de consignar a quienes se negaban a pagar el diezmo a la Iglesia.
La modificación constitucional que propuso la senadora zacatecana de Morena a título personal, María Soledad Luévano, para eliminar el Estado laico y la separación con la iglesia que está definido en la Constitución, no sería algo que ayude, ya que en su momento eso generó confrontación, sostuvo el presidente Andrés Manuel López Obrador, y agregó que desde la oficina de Presidencia no se promoverá esta propuesta.
Entonces uno se pregunta ¿de parte de quién?
Para Juárez la separación de la Iglesia y el Estado representó un proyecto que buscaba minar los privilegios desmedidos que poseía un sector limitado de la población en detrimento de uno más grande y de la autonomía del Estado, el cual velaba por intereses particulares resguardados por la Iglesia.
Tras la caída de Antonio López de Santa Anna con la Revolución de Ayutla y la llegada a la presidencia de Juan Álvarez, Benito Juárez fue nombrado ministro de Justicia, posición desde la que emitió la Ley Juárez, la cual limitaba el poder e influencia del clero en asuntos civiles. Promulgada el 23 de noviembre 1855, esta ley suprimió el fuero eclesiástico y el militar en materia civil.
Tras su irrupción, la ley obtuvo la reprobación por parte de los conservadores y la más alta autoridad eclesiástica, la cual la calificó como violatoria de los derechos de la Iglesia católica aludiendo al derecho divino, e incluso generó malestar en el Vaticano.
La nueva constitución hizo frente a los intereses de la Iglesia católica, pues puso fin a muchos de sus privilegios, entre ellos el fuero y la adquisición y administración de bienes raíces. La oposición a este nuevo régimen desató, para finales de 1857, que los conservadores, apoyados por algunos liberales, dieran un golpe de Estado cuya finalidad tenía anular toda la legislación liberal.
Este hecho dio inicio a una disputa engendrada por cuestiones religiosas que es conocida como la Guerra de Reforma o la Guerra de Tres Años.
Entonces la iniciativa de la senadora Luévano para reformar la Ley de Asociaciones Religiosas y Culto Público, es francamente preocupante. Es un retroceso a la laicidad, por más que trate de disfrazarse de libertad religiosa.
Además después de que se dio a conocer la noticia, la reacción de la mayoría de los mexicanos, es que están de acuerdo en que prevalezca el Estado laico, ya que ello significa también garantizar la libertad religiosa, porque a veces se piensa que el Estado laico es un principio anti religioso, pero no, es garantizar las libertades de creyentes y de no creyentes, nada más que no relacionar los asuntos de las iglesias con lo que corresponde al Estado.
Se puede polemizar polemizar y debatir el tema, pero que se piense bien en las consecuencias y no generar mayores confrontaciones entre los mexicanos de las que ya existen.
En tiempo real
1.- Gobernadores del PAN, PRI y PRD no acuden a las reuniones de seguridad, debido a sus continuas inasistencias y la gravedad de la situación, era necesario “ventanearlos”, pues la coordinación entre los tres ordenes de gobierno es fundamental tratar de enfrentarla.
En el informe ¿Quién es quién? Seguridad pública local, un informe con corte al 30 de noviembre de 2019 con datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, se dio oportunidad al secretario de Seguridad Pública, Alfonso Durazo, de exhibir a los gobernadores “menos participativos en la atención de la problemática” porque no asisten a las mesas de seguridad.
Los gobernadores que menos acuden a las reuniones que se realizan diariamente en los estados: Francisco Domínguez, de Querétaro, y Antonio Echevarría, de Nayarit, quienes no asistieron a ninguna reunión. Carlos Miguel Aysa González, gobernador sustituto de Campeche, sólo ha asistido a una de las reuniones; Miguel Ángel Riquelme, de Coahuila, sólo tiene cuatro asistencias; Diego Sinhue, de Guanajuato, ha acudido a cinco reuniones; Jaime Rodríguez, de Nuevo León, tiene ocho asistencias; le siguen Cuauhtémoc Blanco, de Morelos, con 9 asistencias, y Claudia Pavlovich, de Sonora, con 10.
2.- Santiago Nieto, director de la Unidad de Inteligencia Financiera de la Secretaría de Hacienda, confirmó que se ampliará la investigación a cinco exfuncionarios del sexenio de Felipe Calderón, presuntamente vinculados con Genaro García Luna, entre ellos Luis Cárdenas Palomino.
Agregó además que ya se comprobó la triangulación de recursos desde la Secretaría de Gobernación hacia una cuenta bancaria relacionada con Genaro García Luna.
Según Nieto se hizo una transferencia por dos mil millones de pesos a una empresa de García Luna, quien fue detenido por autoridades estadounidenses quienes lo acusan de colaborar con el Cártel de Sinaloa. Por ello, la Unidad de Inteligencia Financiera presentó una denuncia ante la Fiscalía General de la República (FGR).
3.- La senadora de Morena Lilly Téllez arremetió contra el presidente de la Comisión nacional de Honestidad y Justicia de su partido, Héctor Díaz Polanco, luego de que dicho organismo solicitó remover de la bancada morenista a la también comunicadora.
“Es simulación, venganza, autoritarismo y ambición de poder lo de @diazpol y @HistoriaPedro contra mi persona”, expresó Téllez en su cuenta de Twitter al etiquetar los perfiles de Héctor Díaz Polanco y Pedro Salmerón, ex director del Instituto Nacional de Estudios Históricos de las Revoluciones de México.
Pero este ultimo, le respondió enseguida lo siguiente: “¿Guillotina como la que pidió usted que se me aplicara, Senadora, por buscar la reconciliación histórica y decir lo que pienso?
¿Linchamiento mediático como el provocado contra mí por Felipe Calderón y Vicente Fox”, al cual acusa la senadora se sumó alegremente.
En fin la divisiones en los grupos cercanos a Morena se agudizan.