La nueva naturaleza del episcopado mexicano
Una primera vuelta muy complicada la que ha enfrentado Charros en la presente temporada 2016-–2017 de la Liga Mexicana del Pacífico (LMP) que esta semana concluye, toda vez que por diversas circunstancias su cuerpo de abridores no ha sido posible integrarse y se ha tenido que improvisar, lo que puede pagar muy caro.
El pasado año fueron las lesiones de sus peloteros lo que aquejó durante el campeonato a la novena jalisciense y lo llevó a arrastrar la cobija, quedándole a deber a la su noble afición la gran temporada que la directiva le había prometido, después de un primer año en el que arañaron la gloria al perder la final ante Tomateros de Culiacán quedándose a un paso de su primera corona en la LMP.
Este año el talón de Aquiles del equipo que dirige Homar Rojas es su cuerpo de abridores y no ha podido su directiva y cuerpo técnico contar con un conjunto consistente, convirtiéndose en su talón de Aquiles, porque simplemente los inicialistas que estaban contemplados no han llegado a excepción del norteamericano Terance Marín quien apenas el pasado sábado se incorporó al equipo, pero con un retorno desastroso al lanzar ante Yaquis y apenas completar dos episodios al expulsarlo la batería de la Tribu con un rally de tres carreras.
Han sido nueve los abridores que ha tenido Charros en esta primera vuelta, lo que refleja el tamaño del problema. Ellos son Kyle Simon (fue dado de baja), Bruce Kern (el mejor), Daniel Guerrero (ha funcionado), Marco Tovar (irregular), Matt Zielinsky (fue dado de baja), Tyler Alexander (regular), Terance Marin (se acaba de incorporar), mientras que Octavio Acosta y Manuel Flores (muy erráticos).
Por diversas razones y circunstancias el team jalisciense no ha logrado integrar un cuerpo de abridores que apuntalen al conjunto, ya que de los cinco que inicialmente habían planeado sería su staff simplemente no se dio la integración y en realidad han sido cuatro y el quinto han estado experimentando con Octavio Acosta, Manuel Flores y los norteamericanos que no han funcionado a excepción de Bruce Kern.
Cuerpo diezmado
Charros tenía planeado contar con su cuerpo de inicialistas con Orlando Lara, quien se coronara con los Pericos de Puebla, pero decidió descansar toda la primera vuelta; Héctor Ambriz, que fue adquirido por Charros, siguió su recuperación del brazo y no se ha incorporado; Juan Salvador Delgadillo, no logró quedarse con el equipo al seguir sin alcanzar el nivel que lo distinguió como lanzador estelar, mientras que Marco Tovar ha tenido una temporada muy irregular. El norteamericano Terance Marín apenas se acaba de incorporar. Y de los refuerzos extranjeros ha funcionado Bruce Kern quien tiene 3-2 con 2.50 de efectividad.
Los otros extranjeros Kyle Simon, no dio el ancho al igual que Matt Zielinsky y fueron dados de baja. Como cerrador Aaron Kurcz ha hecho su esfuerzo, pero sin la efectividad que caracterizó a su majestad Brian Broderick en las dos anteriores temporadas de Charros, y en la última semana de la primera vuelta y ante Los Cañeros debutó Stephen Shackleford al lanzar un inning impecable y dejar buen sabor de boca.
De los mexicanos es Daniel Guerrero el que ha respondido y al lado de Bruce Kern se la ha rifado, junto con Tyler Alexander, que ha tenido un desempeño regular, formando parte el mexicano como parte del staff de inicialistas. Terance Marin es el cuarto inicialista, se espera que suba de nivel y el quinto sería Orlando Lara para la segunda vuelta.
En la última semana de esta primera vuelta Charros pasa por un momento difícil con una temporada más bien mediocre con la posibilidad real que quede en el penúltimo o antepenúltimo lugar. En el último no es posible porque no se puede estar peor que el campeón Venados de Mazatlán, hundido en el sótano.