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CIUDAD DE MÉXICO, 8 de octubre de 2016.- A pesar del gasto multimillonario del gobernador Eruviel Ávila Villegas en propaganda mentirosa, casi el 80 por ciento de los mexiquenses no le cree, afirmó el diputado Armando Soto Espino, quien dijo que de igual manera la seguridad pública no mejora en relación a años anteriores.
El dato más sorprendente y contundente es que el 71.2 por ciento de la población mexiquense considera que vivir en el Estado de México “es inseguro o muy inseguro”, subrayó el legislador perredista.
Añadió que el “el tema de la violencia por inseguridad es tan grave, que prácticamente la mitad de la población registra cerca de su vivienda venta de droga, disparos de arma de fuego y extorsiones a pequeños negocios y un dramático 76.6 por ciento afirma que en los alrededores de su vivienda sí se cometen asaltos, mientras que 35 por ciento manifiesta haberse enterado de homicidios violentos”.
El diputado federal por Nezahualcóyotl comentó que un estudio de opinión pública denominado “Los Rostros de la Violencia en el Estado de México” muestra que los entrevistados manifiestan abiertamente ser víctima de algún tipo de violencia. “Tan sólo por inseguridad, el 73.5 por ciento de los entrevistados ha sufrido o sufre algún grado de violencia”.
El 15.9 por ciento de la población mayor de 18 años en el Estado de México se puede catalogar como violenta o violento, de acuerdo con el análisis de diferentes variables.
En cuanto a la violencia en la entidad, 80.5 por ciento afirma que respecto a años anteriores, la violencia se ve igual, aunque añaden que va creciendo.
En este contexto, la aprobación para Enrique Peña Nieto y Eruviel Ávila en el combate a la violencia se encuentra en 28 y 29 por ciento, respectivamente; es decir, prácticamente siete de cada 10 ciudadanos los reprueban, comentó.
Respecto del tema de los feminicidios, 21.7 por ciento de la población se ha enterado de algún homicidio de alguna mujer en su localidad. Lo más lamentable, precisó el diputado Armando Soto, “es que un 10.5 por ciento manifiesta que la principal causa de la violencia contra las mujeres se debe a provocaciones de ellas mismas, creencia por demás reprobable.”