
Del derecho de protestar al derecho de imponer
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Ley de la Guardia Nacional: ¿Riesgo a la democracia?
A partir de esta semana, en el periodo extraordinario, los legisladores mexicanos buscarán, dentro un paquete de 16 iniciativas, aprobar o rechazar la nueva Ley de la Guardia Nacional que permitirá, según la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, concretar una política de Estado para fortalecer y organizar a esta agrupación, bajo su comandancia, es decir una centralización para la diversidad de policías caracterizadas por la fragmentación.
Desde la era de Felipe Calderón Hinojosa, cuando en Michoacán, y en el corazón de la Tierra Caliente y del mismo crimen organizado, declaró la guerra contra el narcotráfico, México ha sufrido a causa de un protagonismo político, ya que, en esta batalla sin cuartel, solo se ha traído consigo resultados que no abonan al dichoso rescate del tejido social, sino por el contrario, a un descontrol de la seguridad nacional.
Esta iniciativa busca borrar este protagonismo, y busca ahora sí, una ley que refuerce una influencia en las áreas civiles de la seguridad pública, y una mayor atribución de vigilancia del Ejército Mexicano contra el crimen organizado en todo el país, que, en este momento, sufre en cada uno de sus rincones, por la lucha frontal entre los grupos armados por el control de los territorios, donde los famosos daños colaterales, dejaron de ser aislados, y cada vez, son más recurrentes.
Pero, esta iniciativa tiene algunas observaciones, que más allá de tintes políticos, puso en alerta y rechazo a varios sectores de la sociedad, entre ellos a los activistas defensores de los derechos humanos, quienes ven una amenaza a las garantías individuales y con ello, una erosión al estado democrático del país, ya que la Guardia Nacional ahora podría procesar y usar información de inteligencia por “seguridad nacional”; Así como acceder a datos de empresas de telecomunicaciones o de georreferenciación de equipos en tiempo real, sin tampoco precisar la exigencia de autorización previa de un juez, incluso también, sustituir a las policías locales o estatales, en la investigación de delitos del fuero común, y exigir que se capaciten en la materia, a pesar de las disminuciones en los programas federales como Fortaseg.
Algunos de sus artículos más que dejar de lado este protagonismo heredado desde hace 20 años, que actualmente está implícito en las “obras de gran calado” o la operación total de las aduanas, y que según es mal llamado militarismo, ya que responde a una decisión política tienen que ser analizados a fondo por las y los legisladores, ya que en este momento de política internacional tan álgido, principalmente con el vecino país del norte, son observados con una lupa mundial, que enciende a la opinión pública, y evidencia una mayor exposición a la corrupción y privilegios en los cuerpos de seguridad.
Para la oposición, esta nueva iniciativa, solo provocaría, de forma precipitada, una militarización de la seguridad, dando paso a un Estado militar, policiaco y totalitario (nada lejano a lo propuesto por Felipe Calderón Hinojosa). Mientras que los morenistas argumentaron que esta propuesta plantea una integración de la Guardia Nacional a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) pretende superar el modelo fragmentado de seguridad pública, a través de una estructura institucional sólida, profesional y con controles democráticos.
Meño
Gobierno de Veracruz niega huachicol artesanal
Aun cuando la noticia hecha por el secretario de Seguridad Pública y Protección Ciudadana, Omar García Harfuch informó, el pasado 18 de junio, sobre el desmantelamiento de una “refinería clandestina” que producía diésel artesanal, nafta ligera o solventes, y aceites tratados o combustóleo ligero, en la zona industrial de Coatzacoalcos, donde curiosamente, también, en estos mismos días, se realizó un bloqueo ciudadano por habitantes de la Congregación de Mundo Nuevo, luego de casi cinco días, la gobernadora de Veracruz, Norma Rocío Nahle corrigió, como experta en la materia de los hidrocarburos, que no se puede llamar refinería a este espacio, sino que se trata de una mezcladora, y reconoció que esta investigación está a cargo de la Fiscalía General de la República, ya que ni el Gobierno de Veracruz ni las autoridades locales fueron notificadas del operativo.
Lo que señaló el comisionado de seguridad federal fue que, en el sitio, que supuestamente operaba sin permisos de impacto ambiental, fueron recuperados 500 mil litros de crudo, así como infraestructura para la producción destinada al mercado ilícito de combustibles, mismos que fueron resultado de las labores de inteligencia y vuelos de reconocimiento en el área, una de las más vigiladas, por sus operaciones portuarias y del Corredor Interoceánico.
Ahora faltará ver quién es el propietario del sitio, como fue otorgado los permisos municipales del gobierno a cargo del morenista Amado Cruz Malpica, y como pudo operar ante la vista de todos, sin que fuera detectado hace meses.
Surada (Viento Norte)
Rechazan mercado municipal de Pátzcuaro
Tras las recientes evidencias de la mala calidad de la obra, varios comerciantes del recién inaugurado mercado municipal Vasco de Quiroga, mismo que tuvo un costo de 300 millones de pesos, decidieron dejar el inmueble y volver a salir a vender a las calles y plazas aledañas, ya que sus ventas son bajas, sumado a la mala logística de operación del edificio.
El alcalde emanado del partido Fuerza Por México, y ahora militante del Partido Verde Ecologista, Julio Arreola reconoció este hecho, pero quien no quiere reconocer este error es el Gobierno de Michoacán, y la titular de la secretaria de Desarrollo Urbano y Movilidad del Gobierno de Michoacán que encabeza Alfredo Ramírez Bedolla, (Sedum), Gladyz Butanda Macías quien aseguró, el pasado mes de abril, durante la inauguración del nuevo mercado de Pátzcuaro, serviría para fortalecer la economía local, se convertiría en un símbolo de tradición; Sin embargo, la realidad es otra.
Dunas
Zitácuaro; la puerta a la realidad de Michoacán
En este municipio del Oriente de Michoacán, una de las regiones más pobres de la entidad, pero que contrasta con su afluencia turística por temporada (navidad y santurarios de Mariposa Monarca), la lucha no solo es entre los grupos del crimen organizado para su control, sino también, una lucha ciudadana para exigir el orden y la paz, ya que, en recientes días, pese a la presencia (que más figuró como mediática) de las fuerzas policiales no se logra regresar la tranquilidad, y sus habitantes comienzan a exigir la salida del presidente municipal Ixtlahuac Orihuela. Al tiempo.