Prepara gobierno estrategia migratoria
CIUDAD DE MÉXICO, 15 de febrero (Quadratín México).- De nueva cuenta, empresas estadounidenses pretenden usar territorio mexicano para desechos que presentan un riesgo para el ambiente. Se trata de 52 toneladas de decodificadores de televisión satelital usados.
La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) informó que inspectores destacados en Altamira, Tamaulipas, detectaron cuatro contenedores con los decodificadores usados, los cuales eran enviados desde República Dominicana por una exportadora de Pasadena, Texas.
La Profepa explicó que el citado cargamento, que ingresó por la aduana de Altamira, fue decomisado porque evitaba presentar el correspondiente permiso de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat).
El material procedente de la República Dominicana, llegó en días pasados, por la vía marítima, al citado puerto tamaulipeco y consiste en cuatro contenedores, de los cuales ya se ha abierto uno y en él se localizaron mil 457 decodificadores inservibles (con un peso de 15 mil 880 kilogramos).
De los cuales el agente aduanal presentó sólo el pedimento de importación hecho bajo una fracción arancelaria que únicamente requiere la autorización de la Secretaría de Economía y no la de la Semarnat.
Se presume que los otros tres contenedores que no han sido abiertos aún por los inspectores de la delegación de la Profepa en Tamaulipas, al mando de Roberto Karlo Villanueva, también traen decodificadores usados y, por tanto, se consideran residuos electrónicos sujetos a regulación de la Semarnat y a inspección de la Procuraduría.
Por lo anterior y conforme a lo establecido por el Acuerdo de Clasificación y Codificación de Mercancías cuya importación y exportación está regulada por la Semarnat, si se insiste en que esos decodificadores usados sean introducidos al país, su importador los tendrá que reclasificar y declararlos bajo la fracción arancelaria correcta.
De lo contrario, la Profepa ordenará su retorno al país de origen, con fundamento en la normatividad ambiental del país y en Convenios Internacionales de los que México forma parte, como es el Convenio de Basilea sobre el control de los movimientos transfronterizos de los desechos peligrosos y su eliminación.
La empresa importadora tiene su domicilio en San Nicolás de los Garza, en el estado de Nuevo León, en tanto, que la exportadora se ubica en Pasadena, Texas.
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