Le dan 100 años de cárcel por crimen de 5 de una familia en Acapulco
CIUDAD DE MÉXICO, 17 de junio de 2016.- La Procuraduría General de Justicia capitalina informó sobre la detención de dos personas relacionadas con el secuestro y homicidio de una joven, presuntamente perpetrado por la pareja sentimental de ésta y un copartícipe, quienes fueron arrestados por elementos de la Fuerza Antisecuestro (FAS) y remitidos puestos a la Fiscalía Central de Investigación para la Atención de Niños, Niñas y Adolescentes, donde se determinará su situación legal.
Los menores de edad fueron ubicados en el tiempo y lugar en la casa de seguridad donde mantuvieron cautiva a la víctima, el sitio en que se hizo el pago del rescate y la zona donde le fue quitada la vida.
De acuerdo con los datos asentados en el expediente, el pasado 28 de mayo, la agraviada salió de su domicilio para encontrarse con su novio en un centro comercial ubicado en la delegación Benito Juárez, desde donde la persona adolescente imputada la llevó a su domicilio ubicado en la colonia Roma, delegación Cuauhtémoc, aprovechando la ausencia de sus padres.
Al lugar llegó el cómplice del joven quien contribuyó a la vigilancia de la ofendida y a tomarle un video en el baño, el cual enviaron a los familiares como prueba de vida a través de una aplicación de telefonía celular y con ello exigir un pago a cambio de dejarla en libertad.
El copartícipe se apoderó de la tarjeta bancaria de la agraviada y acudió a un cajero automático donde retiró dinero, de lo cual la PGJ capitalina tiene el video donde se aprecian las características físicas y la ropa que vestía el adolescente en conflicto y que corresponden a la imagen que tiene en sus redes sociales, evidencia proporcionada por la institución financiera.
Dos días después de negociar la liberación de la menor se acordó entregar una parte del dinero en la colonia San Lorenzo Tezonco, delegación Iztapalapa, lugar al que acudió el novio, quien junto con su cómplice también menor de edad, posteriormente, subieron a la víctima al vehículo de la madre de uno de ellos y se encaminaron rumbo al estado de Morelos, donde la asesinaron y abandonaron.
Cometido el homicidio, las personas adolescentes imputadas regresaron a la Ciudad de México para comunicarse nuevamente con los denunciantes y exigir un segundo pago del rescate.
Una vez que la Fiscalía Antisecuestros tomó conocimiento del ilícito inició las investigaciones del caso y recabó los elementos de prueba que podrían determinar la responsabilidad, entre las cuales se obtuvieron videos de seguridad del centro comercial donde se citaron la víctima y su pareja, así como el registro del lugar en el que fue realizado el pago del rescate y donde fue hallado el cuerpo.
A su vez, la Procuraduría capitalina realizó el correspondiente análisis técnico con el cual se dedujo que el copartícipe era portador de uno de los equipos que mayor frecuencia reportó durante las negociaciones del pago.
Asimismo, las averiguaciones revelaron que éste acudió a una sucursal bancaria ubicada en la delegación Venustiano Carranza para realizar el retiro de efectivo de la tarjeta de la agraviada.
Este 17 de junio, la autoridad judicial autorizó la medida cautelar de cateo en el domicilio del segundo imputado, ubicado en la colonia Pueblo Santa Úrsula Coapa, en la delegación Coyoacán, donde fue encontrada la playera que vestía cuando acudió al cajero automático, siendo la misma que porta en su foto de perfil de redes sociales, lo que permitió corroborar su identidad y participación.
Con la captura de los jóvenes, el primero en la colonia Roma Sur, delegación Cuauhtémoc, y el segundo en el Pueblo de Santa Úrsula Coapa, en Coyoacán, el pasado 15 de junio, la Policía de Investigación adscrita a la FAS dio cumplimiento al mandato ministerial y, derivado de su calidad de menores de edad, el 16 de junio fueron remitidos a la Fiscalía Central de Investigación para la Atención de Niños, Niñas y Adolescentes.
La Procuraduría General de Justicia capitalina refrenda su compromiso de combatir de manera frontal el delito de secuestro, garantizar la protección de las víctimas durante los operativos y trabajar de manera profesional para evitar la impunidad, a fin de mantener la confianza de los capitalinos en las instituciones, y alentar la cultura de la denuncia y la legalidad.