Libros de ayer y hoy
Hasta en los estratos más humildes o rezagados de la sociedad se tiene la certeza que la vía más eficiente para la superación personal, el crecimiento y el desarrollo es, sin duda, la educación.
El gobierno del presidente Peña Nieto reproduce este pensamiento y lo convierte en legítima política pública desde el primer día de su administración, cuando se comprometió a superar problemas y convertir esta responsabilidad en una divisa del gobierno.
La evaluación es una de las herramientas más importantes de la educación, tanto de alumnos como de maestros. Por eso, la Prueba Enlace tiene un significado y es una herramienta importante para el Sistema Educativo Nacional.
No obstante existen algunos problemas. De acuerdo a versiones de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación, se supo que las copias de los exámenes que se vendieron en la víspera de la aplicación de la Evaluación Nacional de Logro Académico en los Centros Escolares (Enlace) son las mismas que a partir de este lunes comenzaron a aplicar los estudiantes de tercero a sexto de primaria
Lo cierto es que, para la ambiciosa agenda de trabajo lanzada por el presidente Peña Nieto, en materia educativa, se incorporan importantes cambios estructurales para acelerar el desarrollo del país.
La reforma educativa busca ir más allá del desafío del siglo pasado de sólo llevar la educación a todos los rincones del país, pues pretende asegurar que ésta sea de calidad. Por ello, es fundamental y elemental realizar la evaluación y convertirlo en un instrumento permanente para definir necesidades específicas de manera regional.
La aplicación de Enlace arrancó apenas en primarias y secundarias del país y concluirá el próximo 7 de junio. La prueba se aplica a los alumnos de tercero a sexto grado de primaria y a los estudiantes de secundaria por octavo año consecutivo. La Evaluación se realiza en escuelas públicas y privadas en asignaturas de Español, Matemáticas, Formación Cívica y Ética y se prevé su aplicación a 13 millones y medio de estudiantes.
Con esta prueba, la Secretaría de Educación Pública (SEP) pretende contribuir al avance educativo de cada estudiante, centro escolar y entidad federativa.
Empero, la sombra del descrédito ronda.
Luego de la aparición de algunas copias de la prueba Enlace, ofertadas la víspera de su aplicación, el líder del magisterio disidente en el Distrito Federal, Francisco Bravo, como voz oficial de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación, exigió la cancelación del examen y, adelantó que valoran la posibilidad de presentar una denuncia de carácter penal ante la Procuraduría General de la República.
Todo esfuerzo por mejorar la calidad y eficacia de la prueba Enlace es bienvenido y útil. Es exactamente lo que muchos jóvenes argumentan a su familia: invertir en la educación no es gasto, es una apuesta asertiva a futuro. Sus resultados son cuestión de tiempo, nada más.
QMX/am