
Ráfaga
No es de extrañar que tanto el PAN como el PRD condicionen su participación en el Pacto por México que suscribieron con el PRI en los primeros días de iniciada la administración del presidente Enrique Peña Nieto.
Las amenazas, declaraciones tronantes o sigilosas de los dirigentes partidistas tienen como único objetivo el obtener beneficios de su participación, así de claro, así de pragmático.
El presidente Enrique Peña Nieta aseguró que el Pacto por México define el inicio de su administración e hizo un reconocimiento a las fuerzas políticas por la madurez y civilidad que han mostrado para lograr los acuerdos que saquen adelante las reformas que requiere el país.
Tanto Gustavo Madero como Jesús Zambrano, hace 4 meses aceptaron la propuesta ideada, aparentemente por José Murat, un poco con la idea de medir la fuerza auténtica del gobierno de Peña. Hoy ambos sienten que su respaldo a esa iniciativa vale más, por eso sus declaraciones o pataleos.
En entrevista con María Elena Salinas, de la cadena Univisión, el mandatario habló de la cooperación en materia de seguridad que habrá con Estados Unidos y lo que viene en el tema migratorio. Garantizó que la cooperación con ese país en materia de seguridad seguirá durante en su sexenio, pero aseguró que se ha reordenado para ser más eficaces en este tema.
Peña Nieto describió sus primeros cinco meses en el poder de la siguiente manera:
“Creo que hay una democracia madura, de mayor civilidad, que está logrando acuerdos en favor de México. Y lo refiero porque el punto de partida de mi administración. Creo que si hay una señal, un signo que sin duda marca este inicio, es el acuerdo logrado con las distintas fuerzas políticas, especialmente las de mayor presencia en México con el gobierno de la República, en un ánimo compartido, en un interés de todos para que realmente logremos acuerdos necesarios para hacer reformas estructurales y transformadoras de nuestra realidad y poder realmente lograr mejores cosas para México.
“Eso creo que es un punto muy importante, no tengo más que reconocimiento a la madurez y a la civilidad con que las otras fuerzas políticas se han mostrado en este acuerdo.
Y a quienes critican su trabajo, les respondió:
“No hago un gobierno para la popularidad ni para estar realmente en una mejor condición, hago un gobierno y estoy encabezando un gobierno que quiere ser eficaz y que quiere dar resultados a la población, que quiere realmente acreditarse en su actuar, logrando que las familias mexicanas tengan mejores condiciones de vida. A eso estoy dedicado y, evidentemente, que maduren las acciones, el que se materialicen cada uno de los esfuerzos que estamos llevando a cabo, llevará un poco de tiempo para que entonces la sociedad pueda reconocer el esfuerzo, el trabajo y los logros que esta administración está realizando”.
Se evidencian los dirigentes partidistas de la oposición cuando, como especuladores voraces, pretenden elevarle el precio a su participación en el pacto por México, el cual ya dio los resultados que se querían. Su sobrevivencia, es ganancia.
QMX/am