Revira Fernández Noroña ante amago de Trump sobre aranceles
CIUDAD DE MÉXICO, 03 de septiembre de 2017.- El 27 de julio pasado, una empleada coreano-paraguaya en la embajada presentó una demanda contra un diplomático mexicano del que no se reveló el nombre, alegando que tocó intencionalmente sus muslos y nalgas varias veces, por lo que era buscado por la justicia de ese país al no presentarse a los llamados oficiales e incluso huir a México.
El diplomático había tratado previamente de evitar una investigación, reclamando inmunidad diplomática, según refiere The Korea Times.
«El oficial involucrado está en Corea con la voluntad de cooperar con las autoridades locales para resolver el caso», dijo la embajada mexicana en un comunicado de prensa emitido el lunes, tiempo de Corea.
«Las autoridades mexicanas supervisarán la situación de cerca en coordinación con sus contrapartes coreanas», añadió.
Después de que fue abierta la investigación, la Comisaría de Policía de Jongno exigió la presencia del diplomático el 3 de agosto quien aseguró que cumpliría, sin embargo, no asistió y se fue a México el 4 de agosto.
El 10 de agosto, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Corea envió una solicitud oficial para la cooperación de la embajada mexicana, destacando la obligación de México de seguir las leyes de investigación coreanas, por lo que la representación mexicana obligó a que el oficial regresara al país asiático a enfrentar las acusaciones.