Hablamos de migración, no de aranceles: Sheinbaum sobre llamada con Trump
CIUDAD DE MÉXICO, 11 de noviembre de 2019.- Ante la crisis de inseguridad y violencia en el país “la sociedad también debe de hacer su parte”, expresó el titular de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), Alfonso Durazo Montaño, al conminar a la regeneración ética partiendo con el ejemplo de un gobierno honesto, austero y comprometido.
En Segunda Reunión de Conferencias Nacionales de Secretarios de Seguridad Pública y de Seguridad Pública Municipal Zona Centro, el funcionario federal subrayó que el Gobierno de México parte de fortalecer la propuesta de atención social para materializar el sentido de la Cuarta Transformación, generador de oportunidades para todos.
“Esa es la única luz que podemos construir al final del túnel, solo restando al crimen organizado su base social podemos reducir la violencia”, enfatizó ante los secretarios de seguridad locales que tuvieron la anfitrionía de la Jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum.
En el encuentro presidido además por el secretario de la Defensa Nacional, General Luis Cresencio Sandoval González; el de la Marina, Almirante Rafael Ojeda Durán; y el Comandante de la Guardia Nacional, Luis Rodríguez Bucio, señaló que la demanda de drogas en el mercado internacional, particularmente de Estados Unidos, y el contrabando ilegal de armas permiten al crimen organizado incrementar su capacidad de fuego.
El titular de la SSPC confió en que los resultados de la Segunda Reunión de Conferencias Nacionales de Secretarios en la materia sean útiles en el mejoramiento de la seguridad pública que es el mayor reto que tienen todos los niveles de gobiernos.
Reiteró que la crisis de inseguridad es el resultado de un modelo económico que ha dejado a millones de personas viviendo en el desamparo y la exclusión, un orden social que se caracteriza además por la desigualdad y potencialmente violento y explosivo.
El senador con licencia refirió que en las últimas décadas algunos estados del país han sido marcados con gobiernos de corrupción, mientras que gobernantes amasaron fortunas los salarios se mantuvieron fuertemente castigados y por ello el empleo formal dejó de ser atractivo para los millones de jóvenes que buscaban opciones de sobrevivencia digna; el desempleo hizo la parte restante.
De esta manera, Alfonso Durazo atribuyó la gestación del contexto perfecto para que la violencia se convirtiera en la válvula de escape de un país dejó brindar futuro a su gente, particularmente a sus jóvenes.