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Tras casi mil días, concluye recuperación de 10 mineros en El Pinabete
CIUDAD DE MÉXICO, 29 de noviembre de 2019.- En sus previsiones para la Actividad Económica, el Banco de México (Banxico) ajustó su perspectiva de crecimiento para 2019 de un intervalo de entre 0.2 y 0.7 por ciento a uno de entre -0.2 y 0.2 por ciento, mientras que para 2020 lo ajustó de un intervalo de entre 1.5 y 2.5 a 0.8 y 1.8 por ciento.
Para 2021, el banco central mexicano estima una variación del PIB en un intervalo de entre 1.3 y 2.3 por ciento. En su informe de la inflación, la evolución económica y el comportamiento de los indicadores económicos del país en el trimestre julio-septiembre de 2019, el ajuste para este año incorpora el hecho de que la información más reciente muestra una debilidad de mayor magnitud y duración a la anteriormente prevista, así como la expectativa de que el crecimiento en el cuarto trimestre del año se vea afectado por una menor actividad en el sector automotriz.
La revisión para 2020 incorpora un menor nivel esperado para el PIB al cierre de 2019, lo que a su vez genera una menor base para el crecimiento de 2020. En este contexto, la expansión esperada por el Banxico responde a la expectativa de que se observe una recuperación de los componentes de la demanda interna, si bien más gradual que lo anticipado previamente y en un entorno en el que la previsión del crecimiento de la producción industrial en Estados Unidos también es menor a la anticipada previamente.
La expectativa para dentro de dos años, en 2021, supone un escenario inercial congruente con la gradual reactivación de la actividad económica en 2020. “Existe un alto grado de incertidumbre alrededor de estas perspectivas, toda vez que se considera que la economía mexicana continuará enfrentando un entorno complejo en el horizonte de pronóstico”, advierte el Banxico en el documento remitido al Senado de la República.
Respecto a los empleos, con base en la mayor información disponible y la revisión de las perspectivas de crecimiento, los pronósticos para el número de puestos de trabajo registrados en el IMSS para 2019 los ajustó de un rango de entre 450 y 550 mil puestos de trabajo a 300 y 370 mil puestos de trabajo.
Para el próximo año se espera un intervalo de entre 500 y 600 mil puestos de trabajo, mismo que se compara con uno de entre 590 y 690 mil puestos de trabajo en el Informe anterior y para 2021 se anticipa un intervalo de entre 510 y 610 mil puestos de trabajo.
En su balance de riesgos para el crecimiento, tomando en cuenta el entorno de marcada incertidumbre, los elementos de riesgo externos e internos que persisten, advierte, “dan lugar a que el balance de riesgos para la actividad económica del país se mantenga sesgado a la baja”.
Entre los riesgos a la baja en este horizonte destacan un agravamiento de las tensiones comerciales que afecte al crecimiento, la inversión y el comercio globales, así como a los mercados financieros internacionales, en detrimento de la actividad económica en México.
Persiste la posibilidad de que Estados Unidos anuncie acciones en materia comercial en contra de México, posiblemente asociadas con temas no comerciales, lo que afectaría las decisiones de gasto de los consumidores y/o a la inversión.
Además, que el proceso de ratificación del T-MEC se prolongue en Estados Unidos y Canadá, manteniendo un entorno de incertidumbre y afectando a la inversión, aunado a que se observen episodios de volatilidad en los mercados financieros internacionales originados por mayores tensiones comerciales a nivel global que den lugar a un menor apetito por riesgo.
También, posibles sorpresas inflacionarias que ocasionen aumentos imprevistos en las tasas de referencia de los principales bancos centrales; un posible contagio proveniente de otras economías emergentes, particularmente ante un entorno de incertidumbre política y social en diversos países; o acontecimientos geopolíticos que pudieran reducir las fuentes de financiamiento externo.