Trastorno Afectivo Estacional: Estrategias de Atención en el IMSS
CIUDAD DE MÉXICO, 18 de enero de 2021.- El mundo está al borde de un fracaso moral catastrófico respecto a la distribución equitativa de las vacunas contra el Covid 19, advirtió este lunes el director de la Organización Mundial de la Salud.
“El precio de este fracaso se pagará con vidas y medios de subsistencia en los países más pobres del mundo”, aseguró Tedros Adhanom Gebreyesus en un fuerte discurso ante la Junta Ejecutiva de la Organización en el que condenó la actitud egoísta de algunos países ricos y compañías.
Mientras que en 49 países de ingresos altos y medios se han distribuido 39 millones de dosis de vacunas, en un solo país de ingresos bajos apenas 25 personas han sido inmunizadas, informó el director de la agencia de la ONU para la salud llamando la atención sobre la inequidad que está ocurriendo y que tanto han luchado por evitar a través de COVAX, una iniciativa que está siendo obstaculizada por contratos bilaterales entre compañías y naciones ricas.
Tedros Adhanom Gebreyesus denunció que incluso aun cuando defienden el acceso equitativo, algunos países y empresas continúan dando prioridad a los acuerdos bilaterales, evitando de esa formar el mecanismo COVAX, la iniciativa puesta en marcha para garantizar un acceso equitativo a las inmunizaciones, lo que está provocando un aumento de los precios y que salten al frente en la lista.
“Esto está mal. La situación se ve agravada por el hecho de que la mayoría de los fabricantes han priorizado la aprobación regulatoria en los países ricos donde las ganancias son más altas, en lugar de presentar expedientes completos a la Organización Mundial de la Salud. Esto podría retrasar las entregas de COVAX y crear exactamente el escenario que fue diseñado para evitar, con el acaparamiento, un mercado caótico, una respuesta descoordinada y una disrupción social y económica continua”, dijo.
Agregó que el enfoque de “yo primero” no solo deja en riesgo a las personas más pobres y vulnerables del mundo, sino que también es contraproducente, y, en última instancia, acciones de ese tipo solo prolongarán la pandemia, las restricciones necesarias para contenerla y el sufrimiento humano y económico.
“En la actualidad, se han administrado más de 39 millones de dosis de vacunas en al menos 49 países de ingresos más altos. Solo se han administrado 25 dosis en un país de ingresos más bajos. No 25 millones; no 25.000; solo 25”, recalcó.