El presupuesto es un laberinto
Las manchas al tigre
Ya no se trata de casos aislados. La magia del gran hermano –las redes sociales- en la granja de la 4T muestra sin maquillaje a los integrantes del gabinetazo. En realidad no todos son lo que dijeron ser.
Si bien hay quienes cumplen con los perfiles y estándares profesionales que requiere el sector público, otros están a años luz de eso y nada justifica que ocupen puestos para los que no están preparados.
La autocomplacencia, la recomendación de incondicionales en algunos nombramientos y decisiones que se apoyan en la frase de “no somos igual que los otros”, está provocando que se repitan los vicios que tanto se han criticado.
Son los que ya en el poder están decididos a hacer lo que se les venga en gana para hacerse de todas las posiciones y repartirlas entre sus allegados, lo mismo que en la época de las cuotas y los cuates.
Dentro de la burbuja de los elegidos hay quienes se echan tierra, o se pican los ojos, al fin y al cabo lo importante es aguantar horas mañanera junto a ya saben quién, aunque las ojeras no se curen ni con un litro de café.
Nos sorprendimos y hasta reímos con las ocurrencias de la secretaria del Medio Ambiente, Josefa González Blanco, cuando se encomendó a los aluxes. Pero eso ya es historia patria.
Ya salió el peine de por qué el nombramiento de la hija del ex gobernador Patrocinio González-, ya que la prioridad es tener el Proyecto Ejecutivo del Tren Maya y asignarlo y luego si hay tiempo, el estudio de impacto ambiental. Y las advertencias del pintor oaxaqueño, Francisco Toledo, de que el Tren Maya provocará un desastre ecológico, bien gracias.
También nos impresionó la incorporación de Esteban Moctezuma a Educación Pública, como enviado de Ricardo Salinas Pliego, aunque los nexos de su hermano con Morena mostraron de qué lado masca la iguana. Luego sorprendió su disposición para anular la reforma educativa y empoderar a la CNTE, pero no se midió cuando aseguró que la nueva dinámica educativa permitirá a los alumnos copiar en los exámenes y más, que aún sin saber inglés los maestros podrán dar clases de ese idioma. La decepción, que Esteban debe aún materias de su carrera. Con razón.
Lo que ocurre en el gabinetazo muestra un gobierno atrapado en la ocurrencia nuestra de todos los días. Van ejemplos.
“Si modista encabeza una subsecretaría, hasta hoy estuvo de funcionaria”, sentenció AMLO en la mañanera sobre el escándalo del día.
Pero qué necesidad, diría Juanga. Pues de verdad que fue de pena ajena el boletín del Conacyt en el que aseguró que la diseñadora de ropa, en funciones de directora ejecutiva de la Comisión Intersecretarial de Bioseguridad de los Organismos Genéticamente Modificados, Edith Arrieta, le dieron el cargo porque “es depositaria de conocimientos tradicionales sobre la agricultura campesina” (sic). La actual jefa de gobierno, Claudia Sheinbaum la recuerda en su equipo dedicada como enlace de comunidades en la distribución de uniformes escolares. ¿Ton´s?
Los casos se multiplican y reflejan que el nivel de los funcionarios del gabinetazo está muy lejos de cumplir con los requerimientos profesionales a que obliga la Ley del Servicio Público, como el caso del subdirector de Comunicación Social del Conacyt, amigo de ya saben quién y al que premiaron sólo por eso. En este caso se repite lo de siempre, los nombramientos por dedazo.
Otra mancha al tigre. También se supo que la secretaria administrativa en Conacyt-Sener, María Chávez García, apenas terminó la secundaria.
Bueno, quien aceptó estos nombramientos es la misma funcionaria que pide regresar a la época de las cavernas proponiendo cancelar las becas a jóvenes talentosos que podrían realizar estudios en universidades extranjeras, la titular del Conacyt, Elena Álvarez Buylla. ¿En qué cabeza cabe? La funcionaria que corre a todos los que puede para asignar las plazas a sus conocidos, tuvo que aclarar que todos los acuerdos de los becarios nacionales y extranjeros se mantienen sin cambios. Eso esperamos.
Lo malo es que al gabinetazo ya lo conocen como el Gabinete Gansito o GG, por no decir patito.
Los ejemplos de nombramientos a modo, las patadas bajo el escritorio y la simulación de los que despiden pero no se van del todo, son muchos. ¿A quién engañan?
Los casos de tres personas a los que se les despidió de sus cargos en Pemex, uno de ellos, Miguel Ángel Lozada Aguilar, como director de Pemex Exploración y Producción por participar presuntamente en la “Estafa Maestra”, en realidad sólo recibieron un jalón de orejas, nada más. El Universal (09-02-19) dejó un dato, que al ex funcionario se le sigue viendo despachar en la casa de visitas en Pemex, en Villahermosa, Tabasco.
El milagrito o descuido se lo colgaron a Irma Eréndira Sandoval, titular de la SFP, por no cuidar los procesos de contratación, pues la distrajeron encargándole la compra de pipas en EU para la distribución de gasolina, que resultaron pipas gansito.
Grilla palaciega
La primera imagen del GG tiene lugar en la mañanera nuestra de todos los días. Los funcionarios desquitan sus sueldos madrugando y soportando estóicos, sin dormirse o cabecear, la hora y media de discursos y a veces incluye respuestas a lo que es la nota del día. ¿Y a qué hora trabajan?
Nadie se escapa de la grilla palaciega. La funcionaria que más se cuida las espaldas, sobre todo de sus colegas, es la titular de Gobernación, Olga Sánchez Cordero. Dicen que no ha gustado cómo ha manejado el tema de la Suprema Corte y aunque llegó a la presidencia Arturo Zaldívar, tiene la encomienda de cabildear la terna en la que figura la esposa del principal contratista de ya saben quién. Pero antes tendrá que sacarse la espina del revés que le impusieron a AMLO por aprobar el amparo contra la Ley de Remuneraciones Públicas.
Otro episodio épico que muestra cómo se puede ser franciscano en la 4T, fue el pleito entre doña Olga y doña Irma por no divulgar la existencia del depa en Houston y que le costó a doña Olga cien años de trabajo, según dijo. En los pasillos del Palacio Nacional se notas además las envidias de quienes ven con cierto reserva que Eduardo García Villegas se convirtiera en el primer Notario Público del país. Por algo será.
Pero doña Irma no sólo se vio envuelta en ese pleito, pues al secretario de Comunicaciones, Javier Jiménez Espriú, también le salió un depa en Houston –casi vecino de doña Olga- que dijo donó a una asociación que hoy encabeza su hijo, pero el caso es que el depa sigue a nombre.
La vocación franciscana de los integrantes del GG no tiene parangón.
Hace poco en un artículo publicado en The Wall Street Journal bajo el título de “Cómo hacerse rico rápido en México”, tomó como ejemplo el caso del empresario Alfonso Romo, su paso por Savia –que cotizaba en el Nasdaq-, su tránsito por Monsanto y su gran apuesta a la empresa productora de semillas, Seminis.
Romo camina por Palacio casi con sandalias de fraile franciscano, pues reconoce dos terrenos, una camioneta, cinco cuentas de inversión y tres tarjetas de crédito. Además del sueldo en el sector público tiene ingresos por actividades privadas por 1.6 millones de pesos mensuales.
Pero ahí no queda todo. A la secretaria del Trabajo, Luisa María Alcalde la reconocen como entusiasta y bailadora, pero se estrenó en conflictos que nadie imaginaba estallaría en la zona fronteriza norte del país, principalmente en Matamoros, Tamaulipas. Lo que también generó suspicacias fue la vinculación del abogado laboral Arturo Alcalde Justiniani -padre de la secretaria-, tras aparecer en una fotografía al lado de la litigante Susana Prieto, vinculada con los sindicatos huelguistas. Afirma que se trató de una guerra sucia.
A la reconocida velocista Ana Gabriela Guevara su amigo Esteban Moctezuma le echó una manota modificando los requisitos para que pudiera hacerse cargo de la Conade, pues apenas llegó a secundaria. El otro caso en el que le metieron el hombro fue el de Paco Ignacio Taibo II y sólo así pudo asumir el cargo de director del Fondo de Cultura Económica.
Otro tema de escándalo fue la presentación ante el Senado de Ángel Carrizales, coordinador de logística de giras de AMLO, quien busca ocupar una vacante en la Comisión Reguladora de Energía. Si un agrónomo es director de Pemex, lo demás es poesía.
El actual gobierno ha venido perdiendo oportunidades doradas para pasar a la historia como el mejor gobierno del cambio.