Revira Fernández Noroña ante amago de Trump sobre aranceles
WASHINGTON, 4 de julio (Quadratín México).- Los incendios que afectan la zona oeste del país y los daños ocasionados por las recientes tormentas en varios estados empañaron las celebraciones de los estadunidenses por el 236 aniversario de su Independencia.
Tradicionalmente los norteamericanos celebran su fiesta nacional con barbacoas y banderas, aunque la sequía y la oleada de incendios en la zona oeste privarán a algunos estados de los fuegos artificiales con los que acostumbran culminar las celebraciones.
Autoridades locales de condados, pueblos y ciudades del centro oeste (Arizona, Nuevo México, Utah, Wyoming, Montana y Colorado) emitieron normas temporales para restringir el uso de cohetes y explosivos.
En Colorado, donde en las últimas semanas se ha producido el incendio más destructivo de su historia, el gobernador, John Hickenlooper, prohibió los fuegos artificiales en las celebraciones privadas en todo el estado.
La prohibición se dio “debido a las condiciones muy secas y al alto peligro de incendio”, declaró.
La medida también impide hacer hogueras en lugares que no estén habilitados específicamente para las barbacoas como zonas de recreación.
No obstante, dada la celebración, la prohibición no es total y se aceptan los fuegos artificiales organizados por profesionales en los municipios cuando “estén autorizados por escrito por el alguacil del condado”.
El problema, según las autoridades, es que con la decena de incendios forestales en activo tienen que concentrar sus esfuerzos y no pueden dedicar efectivos a nuevos fuegos, sobre todo si se pueden evitar.
Las cifras hablan por sí mismas y según los últimos datos disponibles de la National Fire Protection Association, en 2010 los fuegos artificiales causaron 15 mil 500 incendios, incluidos mil 100 edificaciones, 300 vehículos y 14 mil incendios en el exterior.
Otros estados del oeste, que también se han visto afectados por una temporada de incendios temprana, como Utah, se han sumado a las restricciones ya que “el peligro de incendio y su propagación extremadamente alto este año”, advirtió el Departamento de Salud.
En Nuevo México, donde en mayo un incendio forestal consumió 50 mil hectáreas, la gobernadora Susana Martínez ha emprendido una campaña para prohibir los fuegos artificiales, aunque hasta ahora es potestad de las ciudades.
De momento, más de la mitad de los 33 condados que forman el estado han impuesto restricciones y han pedido a los ciudadanos que acudan a eventos organizados por las autoridades locales y eviten realizar celebraciones propias.
En Indiana, aunque el gobernador no ha impuesto restricciones en todo el estado, se han pospuesto algunos eventos comunales y la Orquesta Sinfónica de Indianápolis ha anulado la actuación con fuegos artificiales de fondo con la que suelen despedir este día.
En Indianápolis el alcalde, Greg Ballard, ha firmado una orden en la que prohíbe el uso de fuegos artificiales durante siete días, cuyo incumplimiento pude acarrear una multa de dos mil 500 dólares.
En estados como Nueva York, Nuevo Jersey, Delaware y Massachusetts está prohibida la venta y uso de fuegos artificiales por particulares, mientras que el pasado enero, Michigan y Maine los legalizaron.
Otro de los factores que empaña la celebración es la falta de electricidad y en consecuencia de aire acondicionado, en medio de un verano caluroso, debido a las fallas generadas en el suministro por las tormentas registradas el viernes pasado.
Los apagones alteraron los planes y dejaron a residentes lamentándose de que el cumpleaños del país apenas iba a ser una fiesta.
Comidas al aire libre fueron canceladas o cambiadas a viviendas con electricidad. Planes de vacaciones fueron modificados. Algunos residentes sin electricidad dijeron que no estaban de humor festivo. E incluso algunos a quienes se había restaurado el servicio dijeron que el apagón les había mellado el entusiasmo para celebrar de la forma en que habían planeado.
El número oficial de víctimas se ubicó en 24, registradas en una porción de estados que incluyeron Virginia del Este, Ohio e Illinois, dejando sin electricidad a más de tres millones de casas y negocios y sumiendo en penumbras amplias sectores en muchas comunidades.
Compañías de electricidad en algunas áreas estimaron que sería hasta el fin de semana cuando el servicio se restaure en su totalidad. Hasta el martes por la noche, más de un millón de viviendas y negocios seguían a oscuras.
Al menos cuatro espectáculos de fuegos artificiales planeados fueron cancelados en Maryland a causa de los apagones, y las autoridades dijeron que no podían dedicar policías y bomberos a las festividades.
En Geithesburg Maryland, las autoridades se vieron forzadas a suspender el evento debido a que el área reservada para ello es utilizada por una de las empresas que buscan restablecer el fluido eléctrico a la totalidad de sus usuarios.
En Rockville el evento fue cancelado debido a que parte de los accesos al área para la celebración permanecen bloqueadas por pesados árboles que fueron derribados por los fuertes vientos de la noche del viernes.
Hasta este miércoles, unas 120 mil personas continuaban sin servicio eléctrico en el área metropolitana, la mayoría de ellos en el estado de Maryland.
Aunque el servicio fue restablecido en casi 90 por ciento en muchas comunidades, la presencia de nuevas tormentas debido a la combinación de aire caliente con corrientes de aire frío hace temer que el problema persista.
LeHa Anderson, vocera de la compañía Dominion, una de las empresas que suministran de electricidad la región, afirmó que 90 por ciento de sus usuarios afectados por la tormenta contaban ya con el servicio eléctrico.
La compañía dio a conocer el traslado a la región de cuadrillas de reparación provenientes de otros estados, en anticipación a cualquier afectación de nuevas tormentas.
“Con tormentas y rayos existe el potencial de que tengamos más apagones”, indicó Anderson, cuya empresa trabaja a marchas forzadas para restablecer el servicio a 35 mil de sus usuarios que permanecían todavía en penumbras.
La tormenta provocó enormes daños en las redes del tendido eléctrico, al derribar árboles que echaron abajo cables, y en varios casos cobraron vidas.
Cinco de esas muertes ocurrieron en la zona metropolitana de esta capital, donde varias comunidades mantiene abiertos los llamados “centros de enfriamiento”, para resguardar en especial a ancianos y niños, de las inclementes altas temperaturas.
En Washington, las festividades por el 236 aniversario de Independencia de Estados Unidos no forzaron cambios o cancelaciones de la principal fiesta cívica esta ciudad.
En la capital si bien algunas áreas continuaban sin electricidad, fue la menos afectada debido a que gran parte de su tendido eléctrico es subterráneo.
Esta previsto que como en años anteriores, hasta 500 mil personas se den citan en el “mall” para presenciar 20 minutos del espectáculo de fuegos artificiales, que atrae atención nacional.
El mall, como es conocido popularmente, es una amplia extensión de terreno de verdes prados, abierto y rectangular, con lagos y monumentos, que corre a lo largo de tres kilómetros entre el edificio de El Capitolio hasta el monumento a Lincoln.
QMex/bhr