Persiste ánimo de inversión en México y Estados Unidos: Intercam Banco
CIUDAD DE MÉXICO, 27 de marzo de 2024.- En México, al tercer trimestre de 2023, había 2.5 millones de personas de 15 años y más ocupadas en trabajo doméstico remunerado, cifra que representó 4.2 por ciento del total de personas ocupadas.
De acuerdo con los resultados de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), en 2023, nueve de cada 10 personas dedicadas al trabajo doméstico eran mujeres.
En el marco del Día Internacional de las Trabajadoras del Hogar, que se conmemora el 30 de marzo, la ENOE muestra que 69.5 por ciento de las personas ocupadas en trabajo doméstico remunerado en 2023 no recibió ningún tipo de prestación laboral.
En 1988, durante el Congreso de Trabajadoras del Hogar que se desarrolló en Bogotá, Colombia, se estableció el 30 de marzo como Día Internacional de las Trabajadoras del Hogar. El objetivo es reivindicar los derechos de este sector, promover el trabajo en condiciones dignas y reconocer lo que aporta esta labor a la economía mundial.
Para conmemorar este día, el INEGI integra indicadores sobre las características sociodemográficas y condiciones laborales de las personas trabajadoras del hogar en México.
I. PERSONAS TRABAJADORAS DEL HOGAR
La Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) define a las personas ocupadas en el trabajo doméstico remunerado como aquellas que prestan su servicio en labores de aseo, asistencia, así como en las relacionadas al hogar de una persona o de una familia, a cambio de una remuneración económica. El personal ocupado en trabajo doméstico remunerado incluye a personas empleadas domésticas, cocineras, choferes, a cuidadoras de personas, vigilantes, lavanderas, planchadoras, así como a quienes se dedican a la jardinería en casas particulares.
Por grandes grupos de edad, la población en trabajo doméstico remunerado se concentró en el grupo de 30 a 59. En este, 71.7 por ciento correspondió a mujeres y 63.4 por ciento, a hombres. Siguió el grupo de 60 años y más, en el que el porcentaje de hombres fue mayor que el de mujeres, con 20.2 y 13.5 por ciento, respectivamente. Las personas trabajadoras del hogar tenían, en promedio, 44.5 años.
Al tercer trimestre de 2023, los años promedio de escolaridad para esta población fueron ocho en las mujeres y nueve en los hombres. En otras palabras, las personas dedicadas al trabajo del hogar contaban, en promedio, con secundaria incompleta y completa, respectivamente.
Del total de la población dedicada al trabajo doméstico remunerado, 43.5 por ciento contaba con secundaria. Siguió el grupo de quienes terminaron la primaria, con 25.5 por ciento. Al diferenciar por sexo, el porcentaje de mujeres y hombres que terminaron secundaria fue el más alto, con 43.7 y 42.3 por ciento, respectivamente. En contraparte, 25.9 por ciento de los hombres contaba con estudios de educación media superior y superior. Para las mujeres, este porcentaje fue de 13.3 por ciento.
De quienes se dedican al trabajo doméstico, 30.2 por ciento de las mujeres y 43.1 por ciento de los hombres estaban casados. Siguieron las personas solteras, con 25.1 por ciento para las mujeres y 27.3 por ciento para los hombres. Destacó un mayor porcentaje de mujeres viudas (10.9 por ciento) y separadas (12.2 por ciento) en relación con los hombres (2.8 y 5.7 por ciento, respectivamente).
Del total de quienes se dedicaban al trabajo doméstico remunerado, 38 por ciento eran jefas o jefes del hogar. Según sexo, el porcentaje de mujeres ocupadas en esta actividad que eran jefas de hogar fue de 36.1 por ciento. Para los hombres, este porcentaje fue de 55.8 por ciento.
II. condiciones y características laborales
El trabajo doméstico remunerado es una de las ocupaciones con mayor tasa de empleo informal. Según datos de la ENOE, de los 2.5 millones de personas ocupadas en esta labor, 95.0 por ciento (2 361 408) lo hizo de manera informal y 5.0 por ciento (123 mil 785), de manera formal.
Según sexo, se observó que un mayor porcentaje de mujeres ocupadas en trabajo doméstico remunerado lo hizo en la informalidad (96.3 por ciento). De los hombres, 83.4 por ciento estaba en esta condición.
La distribución de las personas ocupadas en trabajo doméstico remunerado, según tipo de ocupación, se concentró en el grupo de personas empleadas domésticas (82 por ciento, o dos millones de personas). Este incluye al personal que realiza labores de limpieza en casas particulares, además de otras actividades complementarias, como preparación de alimentos, lavado y planchado de ropa, y cuidado de personas.