Lilia E. Cárdenas Treviño, líder social y promotora cultural
CIUDAD DE MÉXICO, 12 de julio de 2024.- En la sede de la Auditoría Superior de la Federación (ASF) exponen la Esencia Cromática de Fernando Andriacci, originario de Cuicatlán, Oaxaca, artista distinguido por su trabajo en pintura, cerámica y obra mural.
A través del tiempo, agrega ASF en un comunicado, se observa la transformación en su trabajo, donde influyen experiencias, donde influyen experiencias, su vida personal, sus viajes, los cuales van nutriendo su discurso y van creando fábulas y personajes que salen de su imaginación y que nos hacen viajar a nuestra infancia.
Expresa que crea sus imágenes por la unión de líneas rectas, en zigzag, curvas, que parecen trazadas con independencia del color, sin embargo, conviven en equilibrio. El empleo de técnicas mixtas enriquece las texturas, sin descuidar la armonía. Así es como Andriacci les da vida a sus obras y las alimenta no solo con su creativo sentir sino con parte de su tiempo y de su vida, la cual va dejando en cada una de ellas.
Además, comparte que Andriacci ha expresado que, para lograr sus obras, se inspira en artistas oaxaqueños, como el Maestro Tamayo, el Maestro Toledo, entre otros, así como en nuestras culturas desde la época prehispánica hasta la actual. Recientemente, recurrió a la técnica del bordado que hacen artesanos oaxaqueños con pintura, pues vivir en Oaxaca enriquece y enamora a la gente que visita el estado por la pintura, la comida, las artesanías, la cultura en general.
Entre las piezas exhibidas del artista Andriacci, se contemplan pinturas al óleo sobre tela, esculturas de bronce, cerámica, madera pigmentada, acero inoxidable y acero a carbón intervenido. Una de ellas es el Vigilante, escultura de bronce de casi tres metros. Entre sus pinturas se resalta El Guardián, una pieza de colores alegres y texturas.
Sobre la influencia de la figura del elefante, que ha sido un sello en sus distintas obras, relató que llevaba al circo a sus hijas y en especial a Fernanda, a quien le encantaban los elefantes y al terminar el acto de los animales, le decía: “ya llévate el elefante papá”, a lo que él le respondía: “no me lo puedo llevar, pero te lo voy a pintar” y así fue como los primeros animales fueron para sus hijas.
Y uno de sus mensajes, es que como oaxaqueños tienen que compartir lo que hacen y transportar el conocimiento a las nuevas generaciones para que el arte y la cultura sean una parte importante en la educación de todo niño y de todo joven, así como el impulsar el arte a nivel nacional e internacional.