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CIUDAD DE MÉXICO, 1 de marzo de 2019.- La deficiencia de los servicios de emergencia quedó evidenciada la mañana de este jueves luego de que un hombre perdiera la vida a causa de un infarto mientras esperó una ambulancia para que lo atendiera.
Este hecho ocurrió en calles de la alcaldía Iztapalapa, el ahora occiso, un hombre de 59 años de edad, conducía su taxi y al ver patrullas que custodiaban el cadáver de un motociclista, solicitó ayuda debido a un fuerte dolor en el pecho.
Los uniformados solicitaron vía radio la ambulancia, en tanto el malestar del taxista se acrecentaba; tuvieron que pasar al menos 50 minutos para que una unidad médica, de servicio particular, acudiera al llamado, pero ya era muy tarde.
Esta situación es muy común en la Ciudad de México, de las 300 emergencias diarias en promedio que ocurren en la capital, muchas no llegan a ser cubiertas debido a la falta de ambulancias de las diferentes corporaciones.
De acuerdo con Myriam Urzúa Venegas, titular de la Secretaría de Protección Civil de la Ciudad de México, existen solo 10 ambulancias en las alcaldías, mientras que el Centro Regulador de Urgencias Médicas sólo tiene cinco operativas.
Debido a esta situación, las emergencias no pueden ser atendidas en tiempo y forma ya que, señaló, no hay la capacidad para atender las situaciones urgentes en la capital del país.
Apenas hace tres semanas, la jefa de gobierno capitalino Claudia Sheinbaum aseguró en una de sus conferencias matutinas que los servicios de emergencia eran prioridad para la capital, pero esto se quedó en palabras.
POCAS UNIDADES
En la capital existen tres instituciones dedicadas a la atención de emergencias, dos dependientes de secretarías locales y una institución de asistencia privada, no obstante, la cantidad de unidades operativas que tienen es mínima.
Por un lado, el Escuadrón de Rescate y Urgencias Médicas, dependiente de la Secretaría de Seguridad Ciudadana, pone en circulación diariamente, para los tres turnos, siete ambulancias.
De estas siete, dos se encuentran de manera fija en puntos de alta concentración de personas, uno de ellos en Ciudad Deportiva, en el albergue de los migrantes, y otro en puntos móviles.
Esto deja únicamente cinco unidades para cubrir las 16 alcaldías, sin contar las que deben regresar a la base, en la zona centro, por cuestiones técnicas o fallas mecánicas y las que se quedan por horas en los hospitales a consecuencia del retraso en la recepción de pacientes.
El caso de la Cruz Roja Mexicana no es muy diferente, pues al día sale a cubrir emergencias con un promedio de ocho unidades, repartidas en las 16 alcaldías, no obstante, también se enfrenta con los mismos problemas en la red de hospitales en la Ciudad de México.
El Centro Regulador de Urgencias Médicas, dependiente directo de la Secretaría de Salud capitalina es la institución que lleva la peor parte, pues además de la obsolescencia de su flota, enfrenta problemas más graves.
El CRUM cuenta con 25 ambulancias, no obstante, solo cuenta con cuatro unidades en servicio, debido a la falta de mantenimiento preventivo y correctivo, pues entre las fallas constantes se encuentran frenos, llantas y motor.
A esto se le suma la falla en el sistema de comunicación, pues la plataforma que utiliza para la radiocomunicación tiene más de 30 años de servicio, lo que lleva a quienes ahí trabajan a utilizar sus propios medios de comunicación para regular las emergencias.
A esta institución le fueron entregadas durante el mes de febrero 17 unidades, pero de estas ninguna está en operación, pues carecen de placas, seguro y equipo especializado.