En las nubes/Carlos Ravelo

Para que la cuña apriete 

Carlos Ravelo Galindo, afirma:

Las damas primero.

Escritora, compositora, reportera y gran amiga, doña  Rosa Maria Campos, desde la tierra del café, Coatepec, Veracruz, en donde vigila la cosecha en su finca, nos anima.

Mi querido amigo te agradezco de todo corazón me honres citando mis artículos en tus  leídas y valientes columnas . Eres un amor-  Rosa Maria 

Ambos fuimos reporteros. Ella en Ovaciones y nosotros en Excélsior.

La arquitecta doña Yolanda Gómez Cobián, desde su oficina secretarial de colonos de Satélite, envía un recado reconfortante:

Me encantó el concepto .  No estoy viejo , solo estoy maduro ¡!!

Un beso. Que recibo con placer y obedezco la orden de Yolis .Cuidate mucho ¡!!

Jorge Herrera y Valenzuela añade otra anécdota que también, con gusto comparto.

“Mi muy estimado y fraternal Carlos Ravelo y Galindo, te comentaré que hace algunos ayeres (quedamos en que no somos viejos, sino maduros)ocurrió que una tarde cuando terminaba mi programa en Radio Fórmula 970, de 2 a 3 de la tarde, entraban al suyo dos queridos colegas don Fernando Marcos y el gran Jacobo Morett.

Mientras recogía mis libros, apuntes y demás, empezaba el programa de mis mencionados amigos y don Fernando dijo:

 «Mire Jacobo, Jorge hace maniobras de retraso para no salir de la cabina y, ¿sabe por qué?, pues para que lo mencionemos y la gente sepa algo de él, aunque sea solo su nombre». 

La carcajada de Jacobo era la rúbrica.

Bueno, pues ahora te comento que ya me conoce más gente, la mucha que lee EN LAS NUBES, porque me haces favor no solo de mencionar mi nombre, sino de que reproducir mis comentarios.

Muchas gracias mi querido y respetado Decano de los Reporteros y Columnistas de México”.

Y sobre el El brillo en la historia nos comenta el escritor don josue beutelspacher

“Querido carlos, me recordaste cinco décadas atrás, 1967, cuando fui a una  entrevista de trabajo en la revista tiempo, con el escritor Martin Luis Guzmán, e invitado por mi amigo Luis Gutiérrez. llegué a las oficinas en la parte alta de las librerias de cristal en la alameda central, y en breve me dieron una orden de trabajo para ir a un sitio que ya no recuerdo y entrevistar a la famosa gatita blanca, doña maría conesa.

La entrevisté y de acuerdo a su edad y fama le pregunte su opinión sobre Pancho Villa y dejé en el escrito su emoción. 

Don Martín Luis Guzmán me aceptó en el staff del semanario y allí comencé a aprender este oficio que me es imposible dejar.

A dos o tres semanas de esto que refiero, las instalaciones de Tiempo se cambiaron a una casona en las calles de General Prim 38, y allí nos tocó el pleito de la Prepa Ochoterena y la Voca 5, con los granaderos y el 68 que no se olvida encima.

Posteriormente Tiempo se cambió a las calles de Barcelona 32, en una casona donde murió Don Martín Luis, en 1976,  propiedad que pasó a manos de la Secretaría de Gobernación y sus archivos vendidos por el nieto Martin Luis Guzmán Ferrer.

Y añade Josué: 

Para la crónica querido Carlos, el Guajolote ya era conocido en México  y oriundo de América, los peregrinos del Mayflower conocieron en Europa el pavo turco Turkey, por lo que pensaron era el mismo.

Eran primos lejanos, amigo, añadimos nosotros.

Un simple capitulo mas , de la ciudad que ya no existe”.

Se te olvidó mencionar que en Barcelona 32, también estuvo el Club Primera Plana, de la que eres actual tesorero, querido Josué.

Y desde Tuxtla Gutierrez, Cjiapas, en donde edita periodico y maneja radiodifusora, por haber publicado uno de sus mil poemas, nos dice don Mario Luis Altuzar Suárez

Muy agradecido con tu gentileza. Fuerte abrazo”

Por supuesto y es natural en la vida cotidiana. 

Y más en estos momento del llamado género que se le aplican adjetivos.

Con eso de que para que la acuña apriete, debe ser del mismo palo, aprovechamos un espléndido, valga el calificativo, artículo de una escritora feminista, doña Sabina Berman, que en El Universal, publicó como fábulas y nosotros compartimos, integro:

“Las mujeres no deberíamos malbaratar la fuerza electoral de nuestro movimiento colectivo dejándonos distraer por intrigas ajenas”

Aúltimas fechas varias feministas connotadas —y un coro de feministos de ocasión— le ha pedido a Claudia Sheinbaum que no sea obediente y que se rebele contra el presidente López Obrador. Que como una valiente Ifigenia del feminismo, se le plante en frente y lo confronte, y exhiba sus diferencias con él.

Lo curioso es que lo propio no se los han pedido a los otros dos candidato sala presidencia de la Izquierda, Marcelo Ebrard y Ricardo Monreal. Un ministro y un senador de la 4T que han refrendado, en cada ocasión que se les ha presentado, su lealtad al Presidente.

—Total respeto a López Obrador— ha dicho Ricardo, cada que un entrevistador lo tienta a declararse contra el Presidente.

Y Marcelo ha empezado todos y cada uno de sus discursos públicos con una mención a su líder político.

—Siguiendo las instrucciones del presidente López Obrador…

¿Por qué a ellos no les piden esa confrontación con el Presidente?

Porque las reglas de la próxima sucesión presidencial están cantadas. Ganará la presidencia, lo más probable, el candidato de Morena —y ese candidato deberá tener la venia del líder de Morena, el presidente López Obrador.

Así que l@s articulistas conceden que los señores candidatos jueguen este juego sucesorio para ganar –y en cambio a la candidata mujer le piden que se suicide.

Amárrate a los rieles del tren, le susurran desde sus columnas de opinión, para que te admiremos por insumisa –aún si a continuación el tren te pasa encima.

No parece un buen consejo. Es un consejo que en el caso de las feministas sinceras no incluye el cálculo de sus consecuencias —y en el caso de los feministos de ocasión tiene un propósito maligno y bien calculado. Al interior de la Izquierda y al interior de la Derecha, la meta es separar desde ahora a la jefa de gobierno de la CdMx de lo que podría ser su mayor fuerza en la contienda electoral del año 2024. La simpatía natural del feminismo, el movimiento social más numero so del país, por una candidata mujer. Una adhesión que le daría el triunfo en las urnas.

Más que atender ese murmullo que la incita a romper lanzas con el Presidente, a mi entender Claudia haría bien en moverse en otro sentido. Debería pulir los disensos que hasta ahora tiene con el movimiento feminista, algunos retóricos, otros más serios: de acción, ninguno insalvable pero cada uno irritante y capaz de crecer hasta convertirse en una franca y explosiva ruptura.

Y las mujeres feministas deberíamos afrontar esta coyuntura política con astucia, no con la ingenuidad que el sexismo nos atribuye.

¿Cuál es el interés del feminismo?

Nuestro interés es que México tenga en el 2024 un(a) presidente feminista. Es decir, un(a) presidente que se declare sin timidez ni reservas así, feminista, y sobre todo que implemente una política pública pro mujer que mejore dramáticamente la vida de las mexicanas.

¿Cómo podríamos asegurarnos de que tal suceda?

No cediendo al llamado de medir a Claudia con una vara distinta que a los otros candidatos. Por el contrario, alzando la vara para medir el feminismo de uno por uno de los candidat@s. Que cada cual exprese lo que hasta hoy ha hecho por las mujeres en los territorios que ha gobernado. Ricardo en Zacatecas y la delegación Cuauhtémoc de la CdMx. Marcelo en la CdMx. Claudia es la misma CdMx. Y que cada cual exprese además lo que haría por nosotras si llega a la presidencia.

No, las mujeres no deberíamos malbaratar la fuerza electoral de nuestro movimiento colectivo dejándonos distraer por intrigas ajenas. En cambio, deberíamos colocar al centro del debate por la sucesión presidencial el interés de la mitad de la población, las mujeres, y eso para asegurarnos de que México tenga en el 2024 un(a) presidente feminista.

La simpatía natural del feminismo es por una candidata mujer.

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