El presupuesto es un laberinto
Un mezcal de Honor
Carlos Ravelo Galindo, afirma:
Tiene toda la razón José Antonio Aspiros Villagómez cuando nos habla de don Alejandro Avilés Inzunza, que entre paréntesis nos honró al presentar en el Club Primera Plana, en 1991, nuestro primer libro “Pláticas Sobre Periodismo”. El literato Aspiros se refiere al libro “Un Grito Sobre Nadie” escrito por don Alejandro. Y nos invita a recordarlo como el hombre que supo ganarse el afecto, admiración y un lugar dentro de la literaturauniversal. Fue, nos dice, un periodista a quien todos sus colegas -muchos de los cuales primero fueron sus alumnos- recuerdan con cariño y gratitud, es Alejandro Avilés Inzunza (1915-2005), el profesor que impartió la primera clase cuando abrió sus puertas la Escuela de Periodismo ‘Carlos Septién García’el31demayode1949. El maestro Avilés, destacado poeta también, es un personaje de cuya calidad humana y profesional han dado testimonio precisamente quienes primero aprendieron de él y luego se convirtieron en sus pares. Su biografía es ampliamente conocida, pero es tan vasta la huella que dejó, que no se agota fácilmente lo que puede decirse de él.
Por eso, una muestra de todo lo escrito por periodistas y amistades sobre el Profe Avilés fue recogida a manera de antología en un libro que será presentado este jueves 17 y por ello cobra actualidad el personaje.
Ya su obra poética completa fue concentrada en 2012 en el volumen ‘Los claros días’, que presentó su hija Rosario precisamente en ‘La Septién’. Décadas antes, su libro ‘Don del viento’, del que toma su nombre un grupo formado por sus ex alumnos para evocar su memoria, había sido publicado por el Club Primera Plana.
Ahora Fred Álvarez y Leopoldo González, coordinadores del libro ‘Un grito contra nadie. Aproximaciones a la obra de Alejandro Avilés’, editado en 2016 por el Instituto Sinaloense de Cultura, han organizado la presentación del mismo en la Casa del Poeta Ramón López Velarde ubicada en la colonia Roma de la Ciudad de México.
Será una gran noche porque habrá una tertulia poética musical que incluye “mezcal de honor” cortesía del maestro Juan Coronel, de Nochixtlán, Oaxaca, y la lectura de poemas del maestro y canto de los mismos, ya que fueron musicalizados por su hija Eva María Avilés.
Solidaria desde hace décadas con su amigo Alejandro, y a pesar de su avanzada edad, asistirá y engalanará la reunión la también poeta y maestra Dolores Castro, autora de uno de los muchos testimonios que contiene ‘Un grito contra nadie’.
También estará presente el artista del diseño Gonzalo Tassier, quien no sólo elaboró a mano y con una tipografía de su creación, el diploma que otorgó ‘La Septién’ a la generación de este tecleador al concluir la carrera, sino también la portada de ‘Los claros días’.
A los coordinadores de ‘Un grito contra nadie’ les pareció de interés incluir en sus páginas nuestro texto ‘Así recuerdo al maestro Avilés’, junto con los de doce destacadas plumas: Gabriel Zaid, Joaquín Antonio Peñalosa, Leopoldo González, Francisco Prieto, Dolores Castro, Juan Bolívar Díaz, Miguel Ángel Granados Chapa, Fred Álvarez, Hugo Gutiérrez Vega, Francisco Gómez Maza y Raúl González Schmall, además de un poema de Roberto Fuentes Vivar y la “obra poética inédita” del mismo Avilés.
González Schmall, por cierto, refiere en su trabajo una curiosa anécdota vivida con el “vochito” que tuvo el Profe Avilés aunque no sabía manejar, el cual conocimos porque en 1964 -cuando fue nuestro jefe en el semanario Mundo Mejor- nos pidió sacar la licencia de conducir para usarlo.
El texto del tecleador incluido en el libro, fue escrito originalmente para el blog del grupo ‘Don del viento’ a invitación de su promotor, el periodista radiofónico Joaquín Gutiérrez Niño, quien por cierto perdió el hogar donde nació en Tonalá, Chiapas, a causa del sismo de septiembre de 2017 y ahora busca donativos para rescatar el archivo ‘Casa del Águila’, un acervo documental en distintos formatos que ahí guardaba con “testimonios de verdaderos valores locales y nacionales”, obtenidos gracias a su trabajo periodístico.
Difícilmente Alejandro Avilés es un personaje desconocido para los lectores atentos. Pero no está de más decir que fue ante todo amigo, además de periodista, poeta, profesor, partidario de la democracia cristiana y militante del PAN, partido del que se retiró, lo mismo que como director de su revista La Nación, por una crisis ideológica en sus filas.
Maestro primero y después el primer jefe de este tecleador en su debut profesional, Avilés también fue director de la Escuela ‘Carlos Septién García’ y tramitó ante la Secretaría de Educación Pública el reconocimiento oficial a la licenciatura en periodismo.
Entre tanto, un “mezcal de honor” entre música, poemas, amigos y recuerdos.