Entre la muerte y la vida/Salvador Guerrero Chiprés

@guerrerochipres

“Échale ganas” o “sé fuerte”. Frases comunes ante momentos difíciles, como la muerte de alguien cercano, con nulo poder de sanación emocional si no se cuenta con una estrategia de resiliencia para afrontar la pérdida.

El duelo, aunque es un proceso natural, puede ser desafiante, y sin el apoyo adecuado, podría ocasionar el descuido de la salud emocional, e incluso, generar pensamientos suicidas. 

De sus cinco fases —negación, ira, negociación, depresión y aceptación—, la cuarta es donde el bienestar está comprometido y se puede detonar el deseo por desconectarse de la vida.

Aunque el duelo generalmente se asocia con la muerte de un ser querido, también puede desencadenarse por otros eventos como el fin de una relación, la pérdida del trabajo, la vivienda, el deterioro de la salud o la ausencia de un animal de compañía.

No todas las personas que los atraviesan están en riesgo suicida, aunque algunos factores pueden hacerles más vulnerables, como los antecedentes de trastornos depresivos, el no tener con quien compartir el dolor, las pérdidas repentinas o traumáticas o responsabilizarse por el fallecimiento del ser querido.

El proceso implica enfrentar la adversidad para encontrar aceptación y se experimenta de manera distinta y con tiempos de sanación diferentes. De acuerdo con las atenciones psicológicas ofrecidas en el Consejo Ciudadano de la Ciudad de México a todo el país, mientras las mujeres suelen manifestar sentimientos de culpa, tristeza y desconsuelo, los hombres expresan más la soledad, ideación suicida y ansiedad.

Cuando no se alcanza la aceptación se habla de «duelo complicado». La persona queda atrapada en un ciclo de tristeza, ansiedad o ira.  En uno de cada 25 casos es el detonante de ideación, planeación o tentativa suicida.

Septiembre es un mes para recordar el valor de la salud mental, las oportunidades de prevención del suicidio y la relevancia de contar con una red de apoyo que escuche sin prejuicios y sin juzgar, capaz de acercar servicios oportunos de contención emocional.

Resolver el duelo no tiene tiempos establecidos, aunque con apoyo, empatía y el acompañamiento adecuado se puede procesar. Desde la Línea de Seguridad o Chat de Confianza, 55 5533 5533, se ofrecen Primeros Auxilios Psicológicos, todos los días del año, las 24 horas, para todo el país. 

Una red de apoyo sólida compuesta por familiares, amigos y profesionales de la salud mental puede marcar la diferencia al procesar la muerte.

Salvador Guerrero Chiprés es presidente del Consejo Ciudadano para la Seguridad y la Justicia de la Ciudad de México