ENTRESEMANA: Gustavo Madero, el presidente solitario

Por tanto, apenas es explicable la sobreactuación de Gustavo Enrique Madero Muñoz –cuya carrera activa en el PAN es bisoña—en ese escenario en el que se suma a la causa del PRD en demanda de que el Instituto Federal Electoral resuelva las denuncias que se han presentado en contra del Partido Revolucionario Institucional por el presunto uso de recursos de procedencia ilegal en la campaña de su candidato presidencial Enrique Peña Nieto.

Madero, sin embargo, evita una ruptura con la estructura del panismo tradicional y la ultraderecha albiazul, y no se suma a la demanda de anular la elección presidencial porque, amén de que ello implicaría el reconocimiento explícito, como presidente nacional del PAN, de que Andrés Manuel López Obrador tiene razón y el presidente Felipe Calderón se apresuró a reconocer un triunfo, el de Peña Nieto, fincado en la compra y coacción del voto.

No se atreve a repetir aquella alianza de 1988 cuando los entonces derrotados candidatos a la Presidencia, Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano y Manuel de Jesús Clouthier del Rincón, acompañados por doña Rosario Ibarra de Piedra –mas no por el sexto pasajero en la contienda, Gumersindo Magaña, nominado por el Partido Demócrata Mexicano–, demandaron anular la elección presidencial bajo el argumento de fraude a favor de Carlos Salinas de Gortari, abanderado del PRI. El ingeniero Heberto Castillo había declinado por Cárdenas.

Y es que Josefina Vázquez Mota, en contraste con Clouthier del Rincón en aquellos años, ha reconocido su derrota y se fue de vacaciones. En 1988, empero, no fue Luis Héctor Álvarez, presidente nacional del PAN, el que se alió con el Frente Democrático Nacional integrado por el PPS, el PMS, el PVEM (ver para creer, prohijado su nacimiento por Manuel Camacho Solís), lo que quedaba del PARM y el PFCRN,  su candidato Cuauhtémoc Cárdenas para exigir al Colegio Electoral (en que se erigía la Cámara de Diputados) invalidar la elección presidencial celebrada el 6 de julio de ese año.

Gustavo apuesta a lavar la afrenta de la derrota electoral que mandó al tercer sitio al PAN, como ocurrió en los comicios de 1988, y permanecer en la presidencia del partido hasta 2013, aunque sea decorativamente.

Tal es la evidencia de su praxis presuntamente combativa. Amaga, incluso, con ausencia de los legisladores del PAN en la toma de protesta de Enrique Peña Nieto como Presidente de la República, el 1 de diciembre. El senador es el hombre solitario del Partido Acción Nacional; sus principales aliados lo han abandonado, o hacen mutis a sus convocatorias.

Veamos la evidencia de esa soledad en la presidencia albiazul. A la pregunta de si respalda la demanda del PRD para invalidar la elección presidencial del pasado 1 de julio, Madero respondió:

“Yo esto no lo considero como un apoyo del PAN al PRD. Es una convicción que tiene nuestro partido de pedir que se aclaren estas denuncias que presentamos nosotros y que coincidimos con el PRD en estos ilícitos. Y tenemos muy claro dónde estamos coincidiendo y dónde no coincidimos. Y seremos respetuosos, sobre todo privilegiando las coincidencias”. Nadie de nivel albiazul lo ha respaldado.

Madero Muñoz dejó de ser útil a la causa de Felipe Calderón Hinojosa y su primer círculo que, como se reporta en una nota de Rubicela Morelos Cruz, corresponsal de La Jornada en el estado de Morelos, ha echado a andar los mecanismos elementales para refundar al PAN piedra por piedra y ponerlo a tiempo para recuperar la Presidencia de la República en 2018.

Y es que, de acuerdo con la nota de la colega, el presidente Calderón se reunió en privado, la semana pasada, con consejeros nacionales albiazules en aquella entidad, entre ellos el gobernador saliente Marco Antonio Adame Castillo, para hacer una especie de recuento de daños y las 60 causas por las que Josefina Vázquez Mota, es decir, el PAN, perdió la elección.

Esta es parte de la estrategia, digamos mejor, la campaña nacional a la que no ha sido invitado Gustavo Enrique Madero Muñoz para refundar al PAN. Cautos y sin prisas, los calderonistas esperarán a que Gustavo concluya su periodo el año entrante. Luego ungirán a uno de los suyos para ir en pos del poder perdido. Conste.

[email protected]

QMex/msl