ENTRESEMANA: Manlio dixit

12 de noviembre de 2012
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9:42
Moisés Sánchez L.

El viernes último Manlio Fabio Beltrones Rivera fue a su tierra, Sonora. Eso no tendría nada de especial, de no ser por el carácter de su visita, la reunión que encabezó y, sobre todo, el largo mensaje que improvisó en un acto de unidad con dirigentes y estructuras de los sectores del Partido Revolucionario Institucional.

La cita fue en Hermosillo, en el auditorio del Comité Directivo Estatal del PRI. Por alguna razón, a los reporteros de la ciudad de México llegó por ahí sin mayor referencia la versión estenográfica del discurso de Manlio; no más, pese al alcance del mensaje del coordinador de los diputados federales priistas.

Por supuesto, aunque no en toda su amplitud, en Sonora fueron recogidas puntualmente las declaraciones de Beltrones, que para mayores señas fue gobernador de esa entidad, amén de que recurrentemente es mencionado para integrarse al gabinete de Enrique Peña Nieto, ni más ni menos que en la Secretaría de Gobernación.

No hay duda que, margen aparte de Luis Videgaray y Miguel Ángel Osorio Chong, Beltrones Rivera es uno de los políticos más cercanos al Presidente electo y, en una praxis poco ortodoxa, operador político. El tema de la reforma laboral, por citar un ejemplo inmediato, ilustra esa cercanía, tanta que Manlio fue la voz de Peña Nieto respecto del sentido que llevaría la votación en torno a esa iniciativa preferente.

Fue un cambio radical entre la primera referencia de que sería Enrique Peña Nieto quien decretara las reformas a la Ley Federal del Trabajo, mas no Felipe Calderón, para luego corregir en la previsión de que será antes de que concluya noviembre y con el mes la administración calderonista. Hay comunicación directa Beltrones-Peña, Peña-Beltrones. Sin duda.

Por eso la importancia del largo mensaje de Manlio en Hermosillo ante el priismo sonorense, pero con extensión a todo el que lo quiera escuchar, leer y entender, a partir de la reflexión de que en los 12 años que el PRI fue partido de oposición, “fueron de enorme aprendizaje para todos nosotros.

“Y es así como cada quien encontró su trinchera, una trinchera de resistencia y que nos hizo llegar hasta este 2012, con un magnifico candidato a la Presidencia de la República, como es Enrique Peña Nieto, y volver a ganar las elecciones presidenciales.

“(…) Pero no era ganar las elecciones, simplemente para permanecer tal cual, sino para esperar resultados. Si los sonorenses acompañaron al PRI y al candidato Enrique Peña Nieto al triunfo electoral, era porque están esperando que las cosas cambien, que vengan reformas que nos hagan recuperar el nivel de crecimiento que perdimos hace ya 12 años, donde México se sumió en la mediocridad”.

Es la crítica y el reproche a Vicente Fox y Felipe Calderón respecto de la mediocridad a la que sus gobiernos llevaron al país en materia de crecimiento económico, creación de empleos, resultados en el combate a la delincuencia y la desigualdad social”.

Luego aludió a un punto en el que se finca la propuesta de la reforma energética, la mediocridad en la administración de la industria petrolera porque, obstante la circunstancia de bonanza petrolera, esto no se ha reflejado en el apoyo al campo, a los que menos tienen. El empleo se vio muy disminuido. ¿Cuál fue el destino de los millonarios excedentes petroleros en la administración de Vicente Fox?, podría plantearse.

Por eso, Manlio sostuvo que “es la hora de recuperarnos, pero la mejor manera de recuperarnos es reorganizándonos, volviendo a pensar que México tiene mucha oportunidad de salir adelante, sobre todo con un firme liderazgo como el de Peña Nieto”.

Y la ponderación a Peña Nieto fue recurrente en este mensaje de Beltrones, en el que puntualizó su convicción de que “muchos de nosotros que lo acompañamos, como una decisión partidaria para que él fuera nuestro candidato a la presidencia de la República, no nos equivocamos. Y es la hora de demostrarlo, sobre todo haciendo llegar los beneficios a quienes creyeron en él y quienes creen que México tiene mejor destino”.

Después fue al área de las reformas y deslindó condiciones. “Es necesario que México tenga reformas, pero (…) que le beneficien al país, (…) que no se vayan hacía el beneficio de los sectores más importantes, económicamente hablando, pero no los más necesitados, y reformas también que no vayan a llevarnos a lo que pueda ser la quimera que siempre termina en un caos”.

Y de la orientación ideológica del gobierno de Peña Nieto, Manlio no dio vueltas y retomó su postura: “Conducirnos por un centro–izquierda, un centro responsable que nos permita estar cerca de la gente, y sobre todo, de sus sectores sociales que más necesitan, ese es el camino del Partido Revolucionario Institucional”.

¿La voz de Peña Nieto, o una reflexión personal y orientadora de Manlio?

“El sacrificio ha sido múltiple –acota Beltrones–. Hoy toca exigir resultados a quienes deberán asumir con responsabilidad el próximo gobierno para hacer esas reformas, para hacer esa transformación que venga a ayudar a campesinos, obreros, clases populares que tienen la esperanza de que a México le vaya bien y junto con México nos vaya bien a todos”.

El discurso tiene otros pronunciamientos, posturas personales y conceptos en plural. Manlio dixit. No tiene desperdicio. Conste.

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QMX/msl

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