ENTRESEMANA: Silvano, Aleida, asuntos de familia perredista

En su respuesta, Silvano reincidió en la fórmula simplista para salirse por la tangente. “Nadie fuma aquí de los que estamos”, dijo en la conferencia de prensa que ofreció junto con sus compañeros legisladores que son cabezas visibles de las corrientes que (des) integran a la bancada perredista, es decir, Izquierda Democrática Nacional, Alianza Democrática Nacional, Foro Nuevo Sol y Nueva Izquierda.

Chuchos, amalios, bejaranistas… ¡Ah!, ausente Martí Batres Guadarrama en esa conferencia cuyo objetivo fue plantar un mentís a la evidente fractura en la fracción parlamentaria perredista en la Cámara baja, indudable consecuencia de desprendimientos de corrientes del PRD para alimentar los cimientos del Partido de Regeneración Nacional, la plataforma desde la que en 2015 y 2018 Andrés Manuel López Obrador reincidirá en sus sueños de poder como Jefe Máximo de la izquierda mexicana.

El meollo es: ¿los opositores a Silvano plantearon o no removerlo de la coordinación? Según lo dicho por Silvano y Aleida Alavez Ruiz, vicepresidenta de la mesa directiva de la Cámara de Diputados, todo habría sido provocado por los perversos periodistas que mal interpretamos lo dicho por Aleida.

Pero la versión estenográfica desmiente a la diputada federal perredista, lopezobradorista recalcitrante y miembro de Izquierda Democrática Nacional, la corriente que, montada en fundamentalismos, en los hechos ha desconocido la autoridad de Silvano Aureoles y planteó su remoción.

Veamos. El martes último (021012) a la diputada Aleida Alavez Ruiz se le preguntó: ¿Peligra o no la permanencia del liderazgo de Silvano Aureoles?

“Pues eso lo tendrá que determinar el grueso del grupo parlamentario, no tengo por qué ni estoy autorizada para hablar en nombre de todos, eso sí, hay que reconocerlo, y hacernos cargo para…”, adujo.

–¿Pero entonces ya está en la mesa de discusión su posible remoción?—se le insistió.

–No lo he dicho así –replicó.

–Pregunto—acotó el reportero.

–Lo vamos a poner en manos del Consejo Nacional porque además, insisto, la temática ahora es lo lesivo de la reforma laboral; el porqué nos dejaron en esa discusión al vacío, subiendo nada más; que acompañáramos, como lo hicieron, con los diputados que se quedaron a discutir y que una por una le iban desechando sus propuestas, porque no están dispuestos a entrarle a la discusión de fondo que es la regresión e en materia laboral–, respondió Aleida.

No hay mala interpretación, por supuesto. Primero, la legisladora evitó pluralizar; pero, luego, pluralizó y su respuesta no deja duda. “Lo vamos a poner (la posible remoción de Silvano) en manos del Consejo Nacional”.

Diferencias, discrepancias, distanciamientos, todo ocurre hasta en las mejores familias. Pero en el PRD ha sido recurrente. Lo peor es cuando se pretende negar el hecho.

Y si han limado asperezas, es elemental cuando de por medio hay que negociar espacios en las comisiones legislativas; el asunto no es menor, se trata de repartir el pastel del poder que el PRD tiene, como la tercera fuerza en la Cámara de Diputados.

De cómo se negociaron, es de incumbencia de los jefes de las tribus. De lo que no hay duda, es que Silvano Aureoles Conejo debió ceder. ¿Qué cedió? Su comentario al inicio de la conferencia de prensa de este primer jueves de octubre, no es mentís a las severas diferencias que hay en el interior de la bancada del PRD, es sencillamente la declaración de que, por el momento, la familia perredista en la Cámara baja se dio un respiro.

“Ha habido muchas preguntas de ustedes (los reporteros) sobre qué va a pasar en el grupo parlamentario y solamente les diría en ese tema que el grupo está cohesionado, que estamos unidos, que el tema del viernes es un asunto pasado, es un asunto cerrado, que le hemos dado vuelta a la página. No es tema de nuestra agenda pública, porque este tema y muchos más, por supuesto que los vamos a seguir discutiendo, dialogando, porque lo más importante para nosotros son los temas de la agenda de la Cámara y sobre todo los temas de la agenda nacional. Hay muchos temas”, declaró Silvano.

Y Aleida Alavez remachó: “(…) Los asuntos internos de la fracción los tratamos, como se los dije en aquella ocasión, internamente, y así es como los vamos a resolver. No vamos a dirimir públicamente lo que nos corresponde dirimir al interior de nuestro Grupo Parlamentario, que además empezó nuestro coordinador señalando que había habido ya una discusión interna, que no forzosamente, lamentablemente estamos acostumbrados a que implicó un acuerdo”.

¿Cuánto durará la tregua? Digo.

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QMX/msl