Es temporada de incrementar la hidratación corporal

GUADALAJARA, 25 de mayo (Quadratín México).- La especialista en Salud Pública del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Jalisco, María Guadalupe Gutiérrez Guerrero, señaló la importancia de incrementar la hidratación durante la época de calor.

Indicó que la hidratación es fundamental para prevenir eventos adversos asociados a las altas temperaturas como es el golpe de calor, sobre todo en niños de menos de cinco años, discapacitados y adultos mayores.

La experta, quien encabeza la Coordinación de Información y Análisis Estratégicos del Instituto en el estado, explicó que el clima ha cambiado en esta metrópoli y ahora se presentan temperaturas extremas de 37 y hasta 39 grados “a las que no estamos habituados”.

Añadió que la gente no está acostumbrada a tomar medidas preventivas como por ejemplo incrementar el consumo de agua, de preferencia natural, y por lo mismo, el riesgo a sufrir eventos como el golpe de calor, se incrementa con consecuencias de leves a graves, dependiendo de las condiciones generales de la persona.

Explicó que la exposición prolongada y directa a la luz solar, es el principal precursor del golpe de calor, de ahí que personas que desempeñan actividades que les implican permanecer a la intemperie por largos periodos de tiempo son los más propensos a padecer este trastorno.

Asimismo deportistas o bien quienes se transportan en vehículos como motos y bicicletas que se exponen al calor, pueden, en caso de no estar bien hidratados, sufrir este evento que ocurre debido a que en días calurosos en extremo, la evaporación del sudor se hace más lenta y con ello el cuerpo es incapaz de bajar su temperatura, refirió, en un comunicado.

Manifestó que cuando ocurre un golpe de calor de inicio la persona puede sentirse débil y mareada, con dolor de cabeza y conforme avanza, el pulso se acelera, además de reducirse la necesidad de orinar, lo que es reflejo de deshidratación.

En casos más severos, la persona puede tener delirios y llegar al coma, con altas posibilidades de fallecer, de ahí la importancia de insistir por un lado en una buena hidratación que si en condiciones normales es de dos litros promedio de agua diaria, se incremente por lo menos en un litro más.

Destacó el hecho de que la hidratación provenga de agua natural y no de refrescos y otras bebidas azucaradas como mucha gente prefiere.

“Las bebidas dulces no mitigan la sed y por lo mismo la gente consume litros y litros de éstas sin que les quite la sed pero además con el riesgo de aumentar de peso por el alto contenido calórico de estos productos”, dijo.

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