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DAD DE MÉXICO, 30 de noviembre (Quadratín México).- El 50 por ciento de los programas de licenciatura del IPN no están acreditados, además tiene una planta de investigadores muy escasa, por ello el nuevo director general deberá surgir de la comunidad politécnica para fortalecer al Instituto.
Durante una conferencia de prensa, el presidente del Consejo de Investigadores del Instituto Politécnico Nacional (IPN), Primo Alberto Calva Chavarría sostuvo que el próximo director deberá contar con el mejor proyecto que permita fortalecer las actividades académicas, de ciencia y de tecnología.
Los datos duros demuestran que 50 por ciento de los programas de licenciatura no están acreditados; 77 por ciento de especialidad, 34 por ciento de maestría y 25 por ciento de doctorado están fuera del Programa Nacional de Posgrados de Calidad del Conacyt, y sólo cuenta con ocho programas de competencia internacional.
Calva Chavarría, quien aspira a ocupar la dirección general del IPN, comparó con la UNAM el número de investigadores que tiene el Instituto y dijo que pese a su tamaño, la segunda institución más grande de México, apenas hay 775 registrados en el Sistema Nacional de Investigadores en este año.
La UNAM cuenta con tres mil 574 investigadores, mientras que la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) tiene 906, en tanto que los acoplamientos con el CINVESTAV y el Canal Once (XEIPN) son en extremo débiles, aseguró.
Dio a conocer que tan sólo en el desarrollo de ingeniería, México tiene solo 10 profesionales por cada 10 mil habitantes, mientras que en Japón y Estados Unidos es de 800 y 980.
En nuestro país, detalló, hay ocho mil 522 programas de posgrado que ofrecen mil 423 instituciones educativas, de las cuales mil 134 son particulares y únicamente 289 son públicas.
El aspirante a conducir el Politécnico, explicó que los posgrados del área de humanidades y ciencias sociales comprenden el 62 por ciento del total nacional y las instituciones particulares ofrecen tres mil 733 programas que corresponden al 78 por ciento del total de estas áreas.
Sostuvo que la función preponderante del IPN debe ser la realización conjunta de actividades de transmisión, generación y aplicación del conocimiento científico y tecnológico.
Por ello, su proyecto de trabajo establece como objetivo general consolidar al Politécnico como una institución rectora de la educación científica y tecnológica del país y como una de las mejores 100 universidades a nivel internacional.
El reto, dijo, es impulsar “su quehacer académico, de investigación y de extensión hacia mayores niveles de equidad, calidad, integralidad, pertinencia y pertenencia, en la perspectiva de una sociedad democrática”.
Ante tal situación por la que cursa el IPN, destacó que un director que no sea conocido dentro del Instituto o que no tenga el apoyo de los más amplios sectores del Politécnico, es claro que no contribuirá a obtener los mejores resultados.
Luego de indicar que el proyecto que encabeza lo dio a conocer desde el pasado mes de febrero, Alberto Calva expuso que su propuesta cuenta con el apoyo del Sindicato de Trabajadores del IPN, 16 delegaciones del SNTE, miembros del Consejo de Investigadores Politécnicos, estudiantes y docentes muy destacados.
El investigador reiteró que el principal problema que enfrenta actualmente el Politécnico es su enfoque organizacional, lo que inhibe la participación colegiada y reduce el concepto de la responsabilidad social que tienen los actores en el proceso educativo.
“El resultado –dijo-, es una institución frenada en su desarrollo, no obstante el elevado potencial de su comunidad y los esfuerzos autónomos de grupos de académicos y de investigadores”.
“Se opera con un ‘Nuevo Modelo Educativo’ ampliamente rechazado por la comunidad, con una infraestructura de laboratorios y de tecnologías de la información y computación insuficiente y en muchos casos obsoleta”.
Todo ello hace que los clasificadores internacionales, en el mejor de los casos, ubican al IPN en el lugar 16 a nivel de Latinoamérica y 551 a nivel mundial, afirmó Alberto Calva.
El investigador aspirante a director general de la institución para el trienio 2012-2015, también dio a conocer que en días pasados presentó al equipo de transición del presidente electo Enrique Peña Nieto, su programa de gestión para el fortalecimiento de la Institución.
Calva Chavarría plantea trabajar también en tres grandes ejes fundamentales: reformas estructurales, reformas académicas y fortalecimiento de la vinculación y nuevas articulaciones con la sociedad.
De igual modo, propone cinco grandes estrategias que deben permear todas las funciones institucionales del IPN: implantación de un nuevo modelo político de gobierno; revisión del modelo educativo y la no unicidad de formas de aprendizaje.
Fortalecimiento de la vinculación con la sociedad, así como con instituciones del sistema educativo nacional e internacional; actualización y aseguramiento del cumplimiento de marco jurídico y de la transparencia; y el aseguramiento de la calidad educativa, la evaluación sistemática del desempeño y resultados institucionales.
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