Navidad y tinieblas
En unas cuantas semanas durante su sesión ordinaria del congreso mexicano, los legisladores lopezobradoristas han modificado el régimen constitucional y político de México, capturando el poder judicial, adueñándose del legislativo y el ejecutivo por una élite política que es ya un caso de estudio.
La victoria con que Claudia Sheinbaum asume el segundo sexenio lopezobradorista, se logró (entre otras cosas) porque la oposición se pulverizó, a la élite política llegaron los trogloditas, se formó una mayoría artificial del lopezobradorismo con el visto bueno de los órganos electorales y, la segunda victoria de Trump anuncia los tiempos violentos para el mundo de la política alrededor del mundo.
De vuelta a nuestro país, el acceso y desempeño de la élite política actual significa que se trata de la élite del poder más ineficiente, corrupta y antidemocrática que consolidó un liderazgo personal de corte de una autocracia popular/populista.
Por lo que hace a la oposición, MC apuesta por consolidarse en ciudades medias, el PRI en su laberinto; el PAN con el cometido de poner énfasis en un programa de derecha con otras temáticas y agendas para resurgir en el escenario político, dado que arrastra con el severo problema que en el primer sexenio lopezobradorista, AMLO se robó la mayoría de la agenda conservadora de la derecha al aplicarla durante su gestión.
Al final del túnel, queda una tímida luz como expectativa para la democracia, a medida que aún no desaparece el lopezobradorismo al INE con su reforma electoral que, consiste en eliminar a los plurinominales, quitarle dinero a los partidos establecidos y, regresar las elecciones a la Secretaría de Gobernación para volver desde allí a organizarlas. Cuando despertó, el dinosaurio estaba allí?
Del Tintero.
Tiene razón Don Miguel de Unamuno: Vencieron, pero no convencieron.
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