Desde el Cuarto de Guerra
La estructura de los gobiernos representativos está caracterizada por los mandatarios, los que gobiernan, que son designados a través de elecciones; ciudadanos libres para discutir, criticar y demandar en cualquier circunstancia, pero que no están capacitados para ordenar qué hacer al gobierno; a su vez, el gobierno se encuentra dividido en órganos separados que pueden controlarse recíprocamente, y está limitado en cuanto a lo que puede hacer por una Constitución, al tiempo que los gobernantes están sometidos a elecciones periódicas y auténticas.
Se optó por esta forma de gobierno preponderantemente porque al menos teóricamente es la que mejor garantiza que los representantes estén en condiciones de gobernar y los ciudadanos en la de vigilar que lo hicieran bien y pusieran a salvo los intereses de la sociedad.
Mediante la evolución política en las formas de gobierno y de democracia llegamos a los gobiernos aristocráticos y oligárquicos, en los que los pocos gobiernan sobre la mayoría, pero la sociedad tiene a su favor aparentemente que sus representantes y gobernantes son electos por ellos en forma periódica, lo que es distintivo de toda democracia.
Don Pablo González Casanova, en la democracia en México precisa que nuestro sistema de partidos es el de un partido de los partidos regionales que, se expresa en Jalisco con sus liderazgos midiendo fuerzas.
Por un lado, el gobernador, Enrique Alfaro reclamando para sí mismo el control de su propia sucesión en esa entidad del Occidente mexicano y, Dante Delgado buscando salirse de su rol patrimonial como dirigente de Movimiento Ciudadano para construirse un personaje disruptivo y antisistema, como los vientos que soplan en nuestra región y, sin embargo, es poco probable imaginar a Dante (no obstante su retórica más reciente) como el personaje que conecte con segmentos inconformes con el sistema político mexicano, del que el dirigente de MC es uno de sus miembros más convencionales antes y ahora.
Al mismo tiempo la encuesta más reciente del diario Reforma le asigna un 4% de reconocimiento de partido, lo mismo que el 53 % al partido dominante y 43 % a los partidos del Frente Amplio por México. Se trata para MC, de puntos clave en el México de la polarización.
En el Frente, su proceso que llega a su fin, ha sido muy favorable a sus miembros y adherentes. La manera de conciliar a su encuesta y votación interna será ponderándolas.
Es verdad que ha sido muy útil (y sorpresivo) el aire de competitividad de Beatriz Paredes y al mismo tiempo es Xóchitl Gálvez quien puede enfrentar de modo efectivo y victorioso, por fuera de los partidos pero no por fuera de la política al aparato lopezobradorista y su principal consigna: Es Claudia.
Del Tintero: El sistema político mexicano es un partido de los partidos regionales, dirá Don Pablo González Casanova.
FB/LINKEDIN: Daniel Adame Osorio.
@Danieldao1