Visión financiera/Georgina Howard
Cabe preguntarnos: ¿puede trabajarse en el diseño de instituciones y leyes que garanticen que los candidatos, lo mismo un gobierno que un parlamento, se mantengan firmes y fieles en torno al compromiso contraído por el electorado?
La respuesta es que eso difícilmente ocurrirá, en primer término, en el caso de los gobernantes, porque llegan al poder enfrentando la realidad nacional que deja su antecesor, y porque el carácter parlamentario, en el segundo caso, es de suyo deliberativo con fuerzas políticas e ideológicas distintas y lo que se impone es la negociación.
En torno a la concepción de gobiernos responsables, su concreción es igualmente difícil, de nueva cuenta porque los incentivos –e incluso los objetivos personales tanto del gobernante como del parlamentario- pesarían más que los de la sociedad, y están dispuestos a pagar el costo político que supondría no seguir los compromisos contraídos con la sociedad ni el cumplimiento de su programa de gobierno expresado en campaña.
Esos programas de gobierno son los ausentes resueltas las candidaturas presidenciales (oficialista y del Frente Amplio por México) y, es el turno de Ciudad de México con el oficialismo promoviendo lo mismo a Omar García Harfush y Clara Brugada con desempeños importantes en sus cargos públicos y, el Frente propone al alcalde reelecto de Benito Juárez, Santiago Taboada, Lía Limón y Adrián Ruvalcaba.
El caso de Hugo López Gatell es su búsqueda de fuero ante el ocaso de la gestión lopezobradorista y, las investigaciones abiertas en su contra por los familiares de los muertos por la pandemia y su cifra de más de 800 mil fallecidos. Debe recordarse el contexto de CDMX en 2021, en que el oficialismo pierde espacio territorial y todavía retiene el poder.
Por lo que hace a la migración desde CHIAPAS, toma a una entidad en el caos lo mismo por los miles de desplazados, el rubro del turismo y su ciudad principal (San Cristóbal de las Casas) tomada por la delincuencia organizada ante un gobierno estatal desparecido.
Ese contexto encuentra la llegada a CHIAPAS de un grupo identificado con el Cártel de Sinaloa entre ovaciones de una población damnificada y sin alimentos. En el sureste inicia la crisis migratoria con las reglas de la delincuencia organizada para dirigir y cobrar por el trasiego de los migrantes y, para controlar entre otras a la Central de Autobuses de CDMX, las líneas de FERROMEX, (recién tomadas por la Marina) el paso por Coahuila y el resto de la frontera norte.
Se requiere una solución con la cooperación internacional ante la pérdida del control del Estado, del territorio, en el contexto de una etapa terrible de la crisis migratoria desde el sur de México que, permanecerá en la agenda pública, ante un año electoral en los dos lados de la frontera y, con un discurso que será aún más radical por el incesante aumento de popularidad de Trump en las encuestas.
Esa es nuestra preocupante coyuntura crítica.
Facebook/LinkedIn: Daniel Adame Osorio.
@Danieldao1