Escenario político/Daniel Adame Osorio

Las elecciones presidenciales en Venezuela son un escándalo alrededor del mundo y, es un acierto la postura de muchas naciones de oponerse al golpe de Nicolás Maduro al voto auténtico que requiere la democracia liberal.

Es por igual vergonzoso el rol del gobierno mexicano de mantener su alianza con Cuba, Nicaragua, Rusia, China y el chavismo sin Chávez y no con la democracia.

A no dudar es un acierto notable de la dirigencia opositora encabezada por María Corina Machado documentar el escrutinio y cómputo y, disponer de las actas de la jornada electoral en su conjunto, poniéndolas a disposición del mundo en internet, mostrando la mayoría lograda por el candidato de la Mesa de la Unidad Democrática, Edmundo González Urrutia, reconocido por muchas naciones como el ganador de los comicios.

Es muy relevante ese acierto en el contexto del modelo electoral diseñado por el Chavismo para permanecer en la élite política a largo plazo con el diseño del poder electoral a su disposición, a través del Consejo Nacional Electoral.

La coyuntura crítica en que se encuentra la sociedad venezolana crece dada su vulnerabilidad por la retórica facista de Nicolás Maduro que mantiene inerme a sus ciudadanos y, sin horizonte (por ahora) de negociación para forzar la salida del poder de la élite chavista que, a una semana de realizada la jornada electoral, no ha mostrado evidencia de su improbable victoria, salvo la lectura de dos boletines a cargo del capturado Consejo Nacional Electoral. Todo lo anterior, mantiene a la sociedad venezolana en riesgo en torno a su vida y libertad.

Del Tintero.

La captura/entrega/secuestro de Ismael (el Mayo) Zambada y Joaquín (el Chapito) Guzmán López representan un espectáculo bochornoso del gobierno mexicano al ignorar todo en torno al caso y su postura de no asumir su responsabilidad. Por su lado, la administración Biden responde a las autoridades mexicanas al no informarles nada de eso que llaman la cooperación.

Es indescriptible la visibilidad del Mayo Zambada que, genera una actitud de disculpa de la administración AMLO ante esa organización criminal que, ha derivado (entre otras cosas) en el episodio del Culiacanazo que puso en libertad a Ovidio Guzmán, por ejemplo. Es por igual inconcebible que sean los equipos jurídicos de los miembros de la delincuencia organizada los generadores de la información disponible.

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