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CIUDAD DE MÉXICO, 8 de septiembre de 2016.- Los diputados del GPPRD Waldo Fernández González y Óscar Ferrer Abalos presentaron un punto de acuerdo para exhortar a las secretarías de Energía y Salud, a la Agencia de Seguridad Industrial y Protección al Medio Ambiente del Sector Hidrocarburos dar un informe pormenorizado sobre las repercusiones que ha dejado en Nuevo León la práctica de fracking para obtener gas natural.
Evidenciaron que desde marzo de este año, según un comunicado, la entidad ha registrado sismos atípicos en las localidades de Allende, Cadereyta, Linares, Montemorelos, en Nuevo León, y Ciudad Gustavo Díaz Ordaz, en Tamaulipas.
“Desde 2016 se han estado presentando sismos en la región citrícola de Nuevo León, van 17 sismos. Por tal motivo, diputados del GPPRD, a través del diputado Ferrer y un servidor, presentamos este punto de acuerdo en el que exhortamos a que informen particularmente lo que está provocando la extracción de gas mediante el método de fractura hidráulica en el estado de Nuevo León.
“Asimismo cuáles son las acciones preventivas que están tomando para resguardar a la población por daños a la salud o ambientales que provoquen dichas fracturas”, señaló Waldo Fernández.
También exhortaron al Centro Nacional de Prevención de Desastres y al Servicio Sismológico Nacional para que haga pública la información sobre las causas que están provocando sismos en Nuevo León, para saber si es debido a la perforación, extracción de la industria de explotación de hidrocarburos.
Consideraron que la 63 Legislatura tiene la responsabilidad de proteger a México de las prácticas de devastación que representa riesgos graves de contaminación y salud, pues hay informes de las consecuencias que este método puede traer a las comunidades y sus habitantes, tales como contaminación de agua, cultivos, generación de gases dañinos para el suelo y subsuelo.
“Quiero aclarar que el fracking es un método de extracción de hidrocarburos en el cual se lleva a cabo una perforación de hasta cinco kilómetros de profundidad, durante este proceso se inyectan de nueve a 29 millones de litros de agua a alta presión mezclados con arena con cerca de 750 aditivos diferentes en cada pozo, procedimiento, que se ha demostrado, ocasiona una fuerte contaminación del subsuelo y de las fuentes de agua”, agregó Fernández.
Ferrer destacó la necesidad de que en nuestro país se prohíba la práctica de fracking “porque no hay ningún argumento que sostenga que debamos permitirlo y nosotros aquí en el Grupo Parlamentario del PRD vamos a sumarnos a esta propuesta, porque esta actividad aún no está regulada y, como consecuencia, puede ocasionar que no se cumpla con el derecho humano que tienen los ciudadanos al agua”.
Y estimaron que es necesario estar a la vanguardia en medidas ambientales y de derechos humanos, y adoptar el principio precautorio hasta asegurar la existencia de otros métodos de extracción de hidrocarburos con métodos que no pongan en riesgo la vida humana ni el equilibrio ecológico.