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CIUDAD DE MÉXICO, 17 de agosto de 2019.- Ante el clima de inseguridad y violencia que enfrentan las personas defensoras de derechos humanos y los periodistas, que hace de nuestro país uno de los más peligrosos para el ejercicio de ambas actividades, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) desarrolló, conjuntamente con la sociedad civil organizada, las campañas Para que un día no tengamos que ser defensor@s de derechos humanos y Con violencia no hay libertad de expresión.
Este Organismo Nacional, convencido de que nuestro país no podrá consolidarse como una democracia si persisten las agresiones contra periodistas y defensores, continúa difundiendo la relevancia que tiene la libertad de expresión y el derecho a defender derechos humanos, y esta semana, en coordinación con las Comisiones de Derechos Humanos de Jalisco y Nayarit, presentó ambas Campañas en las ciudades de Guadalajara y Tepic.
La campaña Para que un día no tengamos que ser defensor@s de derechos humanos tiene como propósito destacar la importante labor que llevan a cabo esas personas en pro de la representación de distintos colectivos y grupos temáticos, así como de la defensa y promoción de los derechos humanos; la Campaña ya fue presentada con anterioridad en la Ciudad de México, Tijuana, Chihuahua, Saltillo, San Cristóbal de las Casas y ante la Junta de Gobierno del Mecanismo para la Protección de Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas.
Y Con violencia no hay libertad de expresión busca reivindicar la labor de quienes tienen a su cargo el ejercicio periodístico en el país y que, desafortunadamente, enfrentan graves condiciones de riesgo e inseguridad en distintas regiones del territorio. Esta ya fue dada a conocer los meses anteriores ante servidores públicos, periodistas y sociedad en general, en la Ciudad de México, Tijuana, Veracruz, Zacatecas, Saltillo, Reynosa, Tuxtla Gutiérrez, Chihuahua y ante la Junta de Gobierno del citado Mecanismo.
CNDH continuará presentando en todo el país dichos materiales y reivindicando la noble y relevante labor de esas personas, así como la importancia que tiene la libertad de expresión y el derecho a defender derechos humanos, sus implicaciones en el fortalecimiento democrático y los riesgos que supone para nuestro país que tanto periodistas como personas defensoras no puedan realizar su labor con plena libertad.