Activan protocolos tras ataque armado a policías en Acapulco
SALTILLO, 6 de octubre (Quadratín México).- Las investigaciones del caso José Eduardo Moreira Rodríguez avanzan y cobra fuerza la hipótesis de que participaron autoridades policiales locales en contubernio con el crimen organizado para cometer el asesinato como acto de venganza de la muerte del sobrino del capo de Los Zetas.
La Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) de Coahuila explicó que el hijo del hermano de Miguel Angel González Treviño, líder del violento grupo dirigido por ex militares que eran el brazo armado del poderoso Cártel del Golfo, murió durante un enfrentamiento de pistoleros del narco y crimen con policías federales.
La dependencia estatal señaló que en este caso, por los hechos y declaraciones ministeriales, se presume la colusión del crimen organizado con autoridades o servidores públicos, e informó que existen varios policías locales, entre ellos un alto mando, detenidos por que existen evidencias de que participaron en el homicidio del hijo del ex gobernador de Coahuila, Humberto Moreira.
La PGJE subrayó que se agotarán todas las posibilidades que técnica y pericialmente puedan permitir llegar a la resolución de este caso, por lo que se informará de manera periódica los avances, pero se resguardará la información correspondiente, a fin de no poner en riesgo su finalidad.
Hasta el momento se han realizado más de 16 pruebas periciales, 21 declaraciones ministeriales y diversas indagatorias para el esclarecimiento de los hechos ocurridos en días pasados, detalló.
Para pronto, el subdirector de la Policía Municipal de Acuña y dos agentes más de la corporación quedaron arraigados tras las primeras averiguaciones de la Procuraduría General de Justicia del Coahuila sobre el asesinato del José Eduardo Moreira.
Tras los interrogatorios, las autoridades de la procuraduría pusieron en arraigo al subdirector operativo de la corporación, Rodolfo Castillo Montes, así como los agentes José Trinidad y Víctor Carrizales.
Antes de esa acción, 48 de los 150 policías preventivos del municipio declararon en el Ministerio Público en Saltillo.
“Giramos instrucciones en coordinación con la Procuraduría General del Estado para poner a disposición del Ministerio Público a los elementos de seguridad que estuvieron trabajando en el turno cuando sucedieron los hechos”, declaró el alcalde Alberto Aguirre Villarreal.
Señaló que él mismo fue citado a declarar como testigo y les dijo a las autoridades ministeriales que la última vez que vio a José Eduardo fue el pasado miércoles al mediodía durante una actividad de su administración, en la que acordaron reunirse ese mismo día por la tarde, pero el hijo de Humberto Moreira no llegó.
Aguirre Villareal informó que el aseguramiento de los policías y su traslado corrieron a cargo de elementos militares.
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