Cielo nublado con clima fresco en CDMX
CIUDAD DE MEXICO, 26 de mayo de 2022.- Mediante un bloqueo de cuatro horas en avenidas céntricas de la Ciudad de México, un “sólo es un ejemplo de lo que viene el 2 de junio” y a través de una rueda de prensa, los integrantes de Fuerza Amplia de Transportistas (FAT) anunciaron medidas de presión al Gobierno de la capital, porque simple y sencillamente incumplió la promesa de anunciar en este mayo el incremento a la tarifa mínima del transporte público concesionado, de tres pesos a los cinco que se cobran actualmente.
Nicolás Vázquez, Enrique Hernández y Francisco Carrasco, entre otros de los voceros de FAT, expresaron, en el cruce de las avenidas 20 de Noviembre e Izazaga, que los funcionarios del gobierno de la Ciudad de México, encabezado por Claudia Sheinbaum Pardo, son los responsables de las afectaciones que realizaron este jueves y realizarán el próximo 2 de junio.
“Nosotros les habíamos dicho a ustedes semanas atrás que confiábamos en nuestro gobierno y en que tendríamos una respuesta favorable porque así nos lo hicieron saber, pero no ocurrió”, expresó Hernández, mientras Vázquez Figueroa dio a conocer que por las profundas necesidades del gremio, hoy “ya no son solicitudes, sino exigencias a la Jefatura de Gobierno de la Ciudad de México, la cual continúa ejerciendo una profunda violencia política, económica y social contra quienes movilizamos a la mayor cantidad de personas en la capital del país”.
Entre las 8 horas y el mediodía, los transportistas bloquearon con autobuses, microbuses y vagonetas, además de decenas de operadores y familiares la avenida Izazaga en el Centro Histórico y sus intersecciones en Pino Suárez, San Antonio Abad, 20 de Noviembre, 5 de Febrero, Isabel la Católica, Bolívar y el Eje Central.
Con cartulinas y lonas recordaron que la tarifa que cobran los concesionarios del servicio de transporte público concesionado en la Ciudad de México es “injusta” a la vista de lo que cobran sus compañeros en otros estados y recordaron que son “rehenes políticos” de “los gobiernos de izquierda que han hecho caso omiso a nuestras demandas, quienes quieren tener un buen transporte público, a costa de nuestro bienestar, de nuestro patrimonio, nuestro trabajo y de nuestras familias que han visto deteriorarse nuestro nivel de vida desde hace 25 años”.
Recordaron que la Ciudad de México es la que traslada a los ciudadanos con el más bajo costo, cinco pesos. Mientras en Monterrey o el Estado de México tienen tarifas 140 por ciento superiores, al cobrar 12 pesos; en Saltillo son 160 por ciento por arriba, al mover a una persona por 13 pesos y Mexicali es 180 por ciento, con un costo de 14 pesos.
También que la tarifa en 1995 costaba 1.50 pesos y hoy sólo ha aumentado 3.50 pesos, cuando el costo del litro de gasolina en aquel año era de 2.24 pesos y hoy es de 24. Hoy existe una diferencia de 19 pesos entre el costo de un viaje y un litro de combustible, cuando en 1995 era de apenas 0.74 centavos.
El combustible, reiteraron, subió casi 850 por ciento entre 1995 y este 2022; las unidades sufrieron un incremento de mil 800 por ciento y el salario mínimo se modificó 824.44 por ciento, mientras la tarifa por cada viaje sólo sufrió una compensación de 233 por ciento.
“También les hemos dicho que el costo del servicio de transporte del Gobierno de la Ciudad de México sufrió un incremento de 806 por ciento en la Red de Transporte de Pasajeros (RTP), cuyo precio real en 2020 era de 13.59 pesos por cada pasajero, mientras que el Trolebús se incrementó mil 909 por ciento por ciento al ser de 30.14, pese a que el público el costo va de los dos y hasta cuatro pesos”, expuso Enrique Hernández.