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CIUDAD DE MÉXICO, 8 de noviembre (Quadratín México).- A 96 años de su nacimiento, el actor, cantante y director Fernando Fernández, “El Crooner de México”, quien destacó en la Época de Oro del Cine Mexicano por películas como “Enamorada” y “Las abandonadas”, sigue vigente gracias a su legado fílmico que continúa proyectándose en la televisión.
Fernando Fernández nació el 9 de noviembre de 1916 en Monterrey, Nuevo León, y murió a los 83 años, el 24 de noviembre de 1999, por problemas cardiacos.
El prolífico artista fue hijo de un inmigrante español y de una indígena kikapú, así como hermano de Emilio “Indio” Fernández y de Jaime Fernández, quienes también destacaron en la actuación y lograron el reconocimiento internacional.
Debutó como cantante en 1933, ante los micrófonos de la emisora XEH de su ciudad natal. Ese año viajó al Distrito Federal sin permiso de sus padres y solicitó ser escuchado en la XEN, Radio Mundial, donde trabajó durante una temporada y luego pasó a la XEB.
Más tarde regresó a Monterrey por exigencia de su padre y se desempeñó como productor en la XET. En 1936 conoció a Emilio Tuero, quien lo ayudó a ingresar a la XEW, donde logró éxito.
El reconocimiento como “El Crooner de México” lo obtuvo luego de que en Estados Unidos se dio esa denominación a los cantantes que interpretaban melodías dulces con voz aterciopelada y susurrante.
En Cuba realizó presentaciones durante las décadas de los años 30 y 40. Además, fue uno de los primeros cantantes mexicanos en recorrer el circuito completo del espectáculo en su época, por lo que también alcanzó éxito en discos, cabarets y en cine.
Su incursión en la televisión llegó cuando concluía su éxito como figura juvenil y comenzaba el camino para convertirse en personaje nostálgico. Es así que se recuerdan sus apariciones en “Sábados con Saldaña”, en el entonces Canal 13, a principios de los años 70.
Además, en 1933 Fernando Fernández se convirtió en el primer protagonista de la primera boda transmitida a través de medios electrónicos en México; contrajo matrimonio con Lupita Palomera, considerada la cantante más bonita de aquellos años, por lo que el evento causó gran expectación, sobre todo a través de la radio.
El repertorio de “El Crooner de México” fue extenso, pero destacaron entre sus canciones aquellas que fueron “soundtrack” en varios filmes, con temas de cabaret y arrabal, como las que filmó al lado de actrices como Marga López y Meche Barba.
Entre otras, se pueden citar: “Un corazón”, “Arrabalera”, “Amar y vivir” y “Traicionera”, con las que triunfó a escala internacional.
Actuó en películas como “La feria de las flores” (1943), “Las abandonadas” (1945), “Enamorada” (1946), “Ahí vienen los Mendoza” (1948), “Dos almas en el mundo” (1949), “Amor de la calle” (1950) y “El casto Susano” (1954).
Fue director de filmes como “El fistol del diablo” (1961), “Trampa fatal” (1961), “El ataúd infernal” (1962), “La sombra blanca” (1963), “El señor Tormenta” (1963) y “Los hermanos Centella” (1967).
Sus últimas participaciones como actor fueron en “Allá en el rancho de las flores”, en 1983, y “El sinaloense”, en 1985. Entre las interpretaciones por las que más se le recuerda están “Un corazón”, “Arrabalera”, “Callejera”, “Hipócrita y “Traicionera”.
El artista, considerado uno de los mejores en la historia de la música popular mexicana, la actuación y la dirección, ha recibido varios homenajes póstumos.
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