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CIUDAD DE MÉXICO, 05 de junio de 2016.- El líder en la Ciudad de México de Morena, Martí Batres Guadarrama, calificó la victoria de su partido político como una derrota para el jefe de gobierno capitalino, Miguel Ángel Mancera.
«Consideramos que (Mancera) cometió el gravísimo error de colocarse de un lado. De ser parte y no de ser arbitro en esta batalla; debió haber estado por encima del conflicto y no como una parte del mismo, fue un error que, se abrazara al PRD, es como agarrar un clavo ardiente, cuando venía en declive. Y cuando él mismo venía como Jefe de Gobierno con el apoyo de muchísimos más y, no sólo de lo que hoy presenta el poder», expresó.
Durante una conferencia de prensa, en la sede de Morena en la capital de la República, el político manifestó que el PRD se ha convertido en otra cosa, «ya no es un partido de izquierda.
«Se ha convertido ahora en un refugio de pandilleros; vimos una campaña negra de protesta, un PRD rayando en lo aberrante; lonas del PRD diciendo que Andrés Manuel López Obrador iba a cerrar las iglesias; eso llama la atención porque antes lo acusaban de ser mocho», añadió.
Explicó que durante el proceso electoral de este domingo un sin números de delitos electorales se cometieron en contra del partido que dirige Andrés Manuel López Obrador, principalmente, en zonas como Coyoacán, Gustavo A. Madero, Venustiano Carranza y Cuauhtémoc.
«Fue vencido el mayor operativo de compra de votos que haya habido en la historia de la ciudad de México, nunca habíamos visto una cosa tan grotesca, tan salvaje. Se quedaron con las ganas. Ganó Morena», dijo.
Batres Guadarrama expresó que el líder del sol azteca, Raúl Flores, «vive en mancerolandia, ya que vive en otra realidad, trae cierto daño en la percepción de la realidad», sobre las acusaciones que emitió esta noche sobre que los militantes de Morena coaccionaron el voto popular.
Recordó que su partido rechazó el dinero que el órgano electoral repartió para costear la campaña política, «Morena renunció al financiamiento de los 10 millones de pesos y decidimos hacer nuestra campaña con las prerrogativas ordinarias».