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CIUDAD DE MÉXICO, 30 de marzo de 2019.- De la cultura del que quiere puede, GRTSCH sigue propagando su sonido en la escena musical y enriqueciendo su proyecto compartiendo tarima con otros músicos.
Quien promociona su EP homónimo ha colaborado con Mon Laferte, Banda Bastón y compartido escena con reconocidos músicos como Ximena Sariñana y Hello Seahorse!.
Rememora en charla que en el Vive Latino pasado Sariñana la invitó a aparecer con ella, una de tantas experiencias que la impulsan a trabajar en un segundo disco, este de larga duración, prevé lanzarlo este mismo año y contendrá 10 canciones.
Estas colaboraciones en vivo con músicos de peso es reforzado con experiencias y ánimo que le comparten ellos mismos, para seguir motivándose y creyendo en su proyecto.
Emocionada al desmenuzar su propuesta, reconoce que ser un músico independiente es difícil, puesto que «no tienes el apoyo de un disquera que te financie los videos, trabajar con alguien para que te haga booking y que tu proyecto pueda ser escuchado, aunque siempre he dicho que el que quiere puede».
Por ejemplo, su primer corta duración, que ya tiene cerca de tres años llegando a los oídos, lo «hice sola, no me tuve que esperar a un productor grande que me agarrara o descubriera.
«Cuando tú tienes las ganas de hacer algo, lo haces, aunque a veces te trabas en cositas como que te ofrecen apoyo gratis y a la mera hora fallan, son trabas que encuentras como artista independiente, sino tienes el dinero; es una lucha constante y de a poco se abren puertas y para mí es muy importante mantener la calma».
Lo que más le gusta a GRTSCH de su música es propagarla en directo, lo cual ha sonado en festivales como RMX o Marvin compartiendo cartel con pesos pesados como Julian Casablancas (The Strokes) + The Voidz.
Quienes «me inspiran, no ha cambiar mi música, pero si a enriquecerla cuando tocó en vivo, como en dinámicas para prender al público, referencias».
En un momento que afina detalles para grabar su primer LP, remata adelantando que su único EP tuvo un sonido oscuro e introspectivo, bajo una cascada de synthpop, pianos y hip hop y «viene una etapa muy bonita que siento va de la mano con lo que hice al principio y además será más bailable, una etapa más feliz».