Habría más de 500 cuerpos en fosa común de panteón xalapeño

XALAPA, Ver., 21 de septiembre de 2016.- Desaparece en mayo de 2011 y es encontrada por las autoridades cuatro meses después, muerta; su cuerpo es enviado a la fosa común en el Panteón de Palo Verde, en la capital veracruzana.

Era Gemma Mávil, y a su padre, don Pedro, nunca le informaron, cinco años después se enteró, y por sus propios medios; pensó que su búsqueda había terminado, que por fin podría darle paz a su hija y buscar, con lo que le resta de vida, resignación; no obstante, halló un nuevo calvario: el cuerpo de su hija no aparece por ningún lado.

“La muerte no debe ser de esta manera”, dice. Donde se supone que la Fiscalía General del Estado decía que se encontraba, no estaba, y donde había de estar un cuerpo, hallaron cinco; se abrió una segunda fosa, y una tercera, y Gemma no aparecía; lo que desenterraron fue, una vez más.

El horror de los desaparecidos: el desorden, la impunidad, el silencio y la descalificación. Ahí podría haber más de 500 cuerpos, ahí podrían estar muchos familiares desaparecidos.

“Después de tantos años de cargar con una pena tan grande y dolorosa y profunda aumentan más… se abre más la herida”, cuenta para Quadratín Veracruz.

Tanto la ex procuraduría de justicia como la Fiscalía de Luis Ángel Bravo “han incurrido en una constante violación a los derechos en el trato de los cuerpos que levantan en calidad de no identificados y son llevados a la fosa común, les dan un trato no digno, “ya no hay respeto ni a la vida, ni a la muerte”.

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