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CIUDAD DE MÉXICO, 12 de mayo de 2023.- La crisis migratoria en la frontera entre México y Estados Unidos, en la que miles de migrantes se quedan sin permisos para transitar, para pedir asilo y en incertidumbre sobre su futuro, mantiene la atención de organismos internacionales.
Ante este panorama, la agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR) y la Organización Internacional para las Migraciones (OIM/ONU Migración) instaron este viernes a adoptar un enfoque colaborativo para una mejor respuesta a los movimientos mixtos de refugiados y migrantes en las Américas.
Al ver con beneplácito las iniciativas positivas para ampliar el reasentamiento y otras vías de acceso regulares en la región, la ACNUR y OIM expresaron también su preocupación por las nuevas restricciones que afectan el acceso al asilo tras el levantamiento, largamente esperado, de la orden de salud pública del Título 42 por parte de Estados Unidos.
“Las restricciones que obstaculizan el ejercicio del derecho humano fundamental a solicitar asilo son inaceptables y contrarias a las obligaciones internacionales de los Estados. La nueva norma adoptada por el Gobierno estadounidense que restringe el acceso para los solicitantes de asilo que llegan de manera irregular, tras transitar por otro país, es incompatible con los principios del derecho internacional de los refugiados”, condenaron.
Señalaron que, a pesar de que el número de personas que se acercan a la frontera estadounidense ha aumentado en los últimos años, la mayoría de las personas en situación de movilidad humana en las Américas sigue siendo acogida por países de América Latina.
“Ningún país puede resolver de forma aislada los retos que suponen los movimientos de refugiados y migrantes. Sólo se pueden lograr avances efectivos realizado esfuerzos conjuntos para abordar las causas del desplazamiento y de la migración irregular; apoyando a las comunidades que acogen a la mayoría de las personas desplazadas; brindando acceso a procedimientos de asilo justos y eficientes y a otros mecanismos de estancia legal; y facilitando el acceso a vías seguras y regulares como alternativas a viajes peligrosos”, sostienen.
En ese sentido, afirmaron que una respuesta más eficaz demanda un esfuerzo de colaboración por parte de los Estados y otras partes interesadas para ampliar el acceso a la protección y al asilo y las vías regulares de migración, al tiempo que se fortalecen las soluciones.
“La iniciativa de Estados Unidos de ampliar el reasentamiento para las personas refugiadas y otras vías de acceso regulares es un paso positivo que puede ofrecer alternativas reales a personas desesperadas que arriesgan sus vidas para encontrar seguridad y soluciones. Facilitar y ampliar el acceso a los programas de reasentamiento, reunificación familiar, patrocinio humanitario y movilidad laboral puede salvar vidas y proteger a las personas de la trata, el tráfico, y otras formas de violencia.
Si se gestionan adecuadamente, también pueden apoyar a las economías nacionales que se enfrentan a escasez de mano de obra. ACNUR y la OIM están dispuestos a redoblar sus esfuerzos para trabajar con todos los países y con los mecanismos regionales existentes para que esto se convierta en realidad. Sin embargo, la ampliación del reasentamiento y de otras vías regulares no puede sustituir a la responsabilidad de los Estados de garantizar a las personas el acceso al territorio y a los procedimientos de asilo”, enfatizaron.