Lilia E. Cárdenas Treviño, líder social y promotora cultural
CIUDAD DE MÉXICO, 19 de agosto de 2024.- En un mundo en constante cambio y conflicto, la voz de Vicente Quirarte recuerda la trascendencia de la literatura y el lenguaje poético como refugios del pensamiento y herramientas poderosas que no solo son espejos y metáforas de la realidad, sino también una vía necesaria para transmutarla, afirmó el rector de la UNAM, Leonardo Lomelí Vanegas.
Al inaugurar el coloquio “Vivir es escribir con todo el cuerpo. Vicente Quirarte en sus 70 años”, el rector señaló que es un homenaje a un intelectual que ha enriquecido la esfera literaria y académica, además de haber tocado muchas fibras sociales. Es una ocasión para analizar el impacto de una vida dedicada -con ética y entusiasmo- a los lenguajes artísticos y la configuración de nuestra percepción sociocultural.
“Tu vida y obra son un ejemplo de pasión, dedicación, libertad y compromiso que sirve de inspiración para el camino de muchos. En nombre de la Universidad Nacional Autónoma de México te expresamos nuestra más sincera admiración y gratitud”, subrayó Lomelí Vanegas en el auditorio “José María Vigil”, de la Biblioteca Nacional de México.
Acompañado por el exrector de esta casa de estudios, José Sarukhán Kermez; integrantes de la Junta de Gobierno y directores de diversas entidades universitarias, Leonardo Lomelí subrayó al poeta el gran orgullo de la Universidad Nacional por él, que es uno de sus más ilustres egresados, cuya trayectoria ha dejado marcas indelebles a nivel nacional e internacional.
Su amplia obra, indicó, abarca poesía, ensayo, dramaturgia, narrativa e investigación; se destaca por explorar y difundir las letras universales, latinoamericanas y mexicanas con honestidad intelectual, así como con una sensibilidad y erudición que ha inspirado a generaciones de lectores y escritores.
“A través de su pluma, el doctor Quirarte ha abierto una ventana luminosa para pensar nuestra identidad intercultural, entrelazando el pasado y el presente con una maestría única”, remarcó el rector Lomelí.
Asimismo, aseveró que el autor de más de 20 libros y 150 artículos especializados ha sido un pilar fundamental en la formación de nuevas generaciones de escritores y académicos, y su experiencia ha resultado crucial para el desarrollo de muchos talentos emergentes.
En su oportunidad, el presidente de la Fundación para las Letras Mexicanas, Miguel Limón Rojas, aseguró que al celebrar al autor del libro “El ángel es vampiro” se evoca el poderoso espíritu que por generaciones ha animado la vida de la Universidad Nacional: la creación e impartición de conocimiento que contribuye a saber quiénes somos y cómo ser mejores.
El poeta, consideró, es un hijo verdadero y leal de la UNAM, quien con humildad y entrega ha desarrollado el oficio de escritor. Para la Fundación su presencia ha sido enriquecedora y estimulante, ha hecho múltiples aportaciones y brindado su consejo ilustrado y oportuno, ha apoyado a la evaluación de jóvenes para ingresar a sus becas y ha tenido una participación esmerada y comprometida como tutor de los grupos de ensayo. “Es un honor participar en este homenaje que la Universidad merecidamente te ofrece”.
En tanto, el presidente de El Colegio Nacional, Eduardo Matos Moctezuma, apuntó que con el coloquio se celebran siete décadas de aplomo, perseverancia y poder creativo de quien es profundamente universitario y ha logrado consolidar su obra con pluma ágil y pensamiento lúcido.
Recordó que en 2016 Quirarte ingresó a El Colegio Nacional y al grupo de escritores miembros de esta agrupación, conformado por Alfonso Reyes, José Vasconcelos, Mariano Azuela, Jaime Torres Bodet, Octavio Paz, Carlos Fuentes, entre muchos otros. Durante su cátedra de ingreso manifestó que “el poeta no es solo el hacedor de versos, sino que consagra su energía a perpetuar la iluminación del instante y a levantar edificios verbales inmunes al paso de los años. Gracias por tu presencia, Vicente”.
A su vez, el director de la Academia Mexicana de la Lengua, Gonzalo Celorio Blasco, destacó que su relación afectiva e intelectual con Quirarte data de los años 70 y se ha enriquecido a lo largo del tiempo, en el que han coincidido en instituciones como la Academia -de la que el poeta es miembro desde 2002- y la UNAM, que ha sido la casa nutricia de ambos.
El homenaje, agregó, da cuenta de la amplitud de los intereses de Quirarte cuya producción incluye poesía lírica, teatro, narrativa, ensayo, historiografía, crónica, autobiografía; además se aborda su papel de editor, bibliófilo, interlocutor de fantasmas, vampiros, cazador de imágenes balleneras, historiador, erudito, amante de la historia de México, viajero infatigable, académico riguroso, nacionalista y universal. “Sus obras constituyen un universo complejo y completo; uno y diverso. El universo de Vicente Quirarte en el que no podemos dejar de gravitar. Felicidades, Vicente tan querido”.
Previamente, el coordinador de Humanidades de la UNAM, Miguel Armando López Leyva, enfatizó que el ganador de premios como “Xavier Villaurrutia” y “Punto de Partida” es universitario desde los 12 años, cuando ingresó a iniciación universitaria; luego cursó sus estudios de licenciatura y, posteriormente, se incorporó como investigador por obra determinada.
Además, ha sido director general de Publicaciones de esta casa de estudios, director del Instituto de Investigaciones Bibliográficas, así como de la Hemeroteca y Biblioteca nacionales, de las cuales ha sido su defensor. En 2017 fue designado integrante de la Junta de Gobierno y a partir de marzo de 2019 ocupa la presidencia honoraria del Consejo Consultivo de la Hemeroteca y Biblioteca nacionales, por su compromiso con el cuidado de esta “herencia viva”. Es también una de las principales voces en el estudio de las bibliotecas, los libros y de nuestra historia, recalcó.
La directora del Instituto de Investigaciones Bibliográficas, María Andrea Giovine Yáñez, puntualizó al también integrante del Sistema Nacional de Creadores que su nombre, Vicente, significa “aquel que vence” y el auditorio lleno para homenajearlo es prueba de una vida bien vivida en la academia y la cultura, con una copiosa cosecha de afectos sembrados, de reconocimiento y admiración.
“En estos primeros 70 años has elogiado la calle y el amor, defendiste el honor, vitalidad y permanencia de la Biblioteca Nacional en un momento paradigmático de nuestra historia institucional a inicios del milenio, y libro a libro, página a página has dejado huella indeleble en muchos corazones. Felicidades, poeta y amigo. Felicidades, señor exdirector, presidente honorario de la Biblioteca Nacional. El corazón de esta institución late con emoción en este merecido reconocimiento a tu vida y trayectoria”, acotó.
El coloquio se extiende durante las próximas semanas en la Biblioteca Nacional de México y el homenaje continúa en otros espacios como El Colegio Nacional y en la Feria Internacional del Libro Universitario.