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CIUDAD DE MEXICO, 16 de septiembre (Quadratín México).- Por vez primera en la historia del Desfile del 16 de septiembre, marcharon juntos elementos de las Fuerzas Armadas de México y de Seguridad Pública, representados por integrantes de la Policía Federal, como símbolo de su unión en la lucha emprendida en contra de la delincuencia.
Alrededor de 19 mil elementos de la Secretaria de Defensa Nacional, Ejército, de la Fuerza Aérea, de la Armada de México y de la Policía Federal y personal del agrupamiento de charros, desfilaron ante miles de mexicanos, que hicieron eco a las palabras del discurso del presidente Felipe Calderón: “ Este día vibra en cada hogar el honor, el orgullo de ser mexicano. Hoy todos refrendamos el amor que sentimos por esta noble tierra, el amor que sentimos por nuestro gran México”.
Desde temprana hora, cientos de familias se apostaron en las avenidas de 5 de Mayo, Eje Central, Lázaro Cárdenas, Juárez y Reforma, para observar muestras de las estrategias que realizaron los uniformados en su trayecto del Zócalo al Campo Marte, en representación de sus fundamentales responsabilidades: Defensa de la soberanía nacional, protección de la seguridad interior, acciones cívicas y sociales, aplicar el Plan N3 o la ayuda a la población civil en caso de desastre.
Adultos y niños observaron emocionados el paso de las Fuerzas Armadas, presentaron por primera vez el nuevo uniforme de campaña de selva y desierto, caracterizado por un color más claro y el pixelado difuminado.
Los militares exhibieron también nuevos vehículos, maquinarias, equipo, carros alegóricos, y cuatro de los seis nuevos aviones de entrenamiento T6 Texan II, que surcaron el cielo junto con 88 aeronaves más dispuestas para esta demostración del poderío de las Fuerzas Armadas.
Muchos de los asistentes tuvieron presentes las palabras del presidente Calderón: “Acudimos hoy aquí, a esta imponente Columna de la Independencia, para honrar y rendir un tributo de gratitud a quienes derramaron su sangre para que México tuviese nuestro nombre y fuera nuestra Patria, nuestra Nación soberana, libre e independiente en el mundo”.
Una emoción mayor embargó a los niños que tuvieron la oportunidad de subirse a los tanques y otros vehículos de guerra para tomarse la foto junto con elementos militares, ante la algarabía de sus padres: “uno a cada lado del señor soldado”, instruía Don Fausto a sus dos hijos que emocionados veían al uniformado, situación que se replicaba decenas de veces con otras familias.
De esta forma se hizo evidente que se cumplió el objetivo de lograr mayor cercanía entre la población y los militares responsabilizados de salvaguardar su seguridad, como se lo propuso el presidente Calderón, quien en su discurso en la conmemoración del 202 Aniversario de la Independencia, el último de su gobierno, emitió un mensaje especial: “Patria… Te hemos ofrendado lo mejor de nuestros esfuerzos. Más allá de nuestros yerros y nuestros aciertos, ha estado presente, siempre, en nuestra acción la apremiante consciencia de hacer y decidir lo que sea mejor para México”.
Los festejos concluyeron con juegos pirotécnicos, que prolongaron por unos momentos mas la alegría y emoción de los asistentes al Desfile del 16 de septiembre.
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