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QUITO, ECUADOR, 24 de mayo (Quadratín México).- El presidente ecuatoriano, Rafael Correa, juró ante la Asamblea Nacional para un nuevo periodo de gobierno de cuatro años, ceremonia a la que asistieron delegaciones oficiales de 90 países.
Un emocionado Correa vio entrar al salón de la sede del Legislativo a una niña con síndrome de Down que portaba su banda presidencial, tras lo cual hizo el juramento de rigor que fue tomado por la presidenta de la Asamblea Nacional, Gabriela Rivadeneira.
La legisladora oficialista le impuso la banda presidencial y luego fueron leídos los respectivos decretos que lo empoderaron en el cargo hasta 2017 y también se tomó juramento al nuevo vicepresidente ecuatoriano, Jorge Glas.
En su discurso, el mandatario dijo que el país está cambiando “profunda y positivamente” en lo económico, político y social y aseguró que ha pasado del grupo de desarrollo humano medio al alto.
Aseguró que Ecuador es una de las economías más dinámicas de América Latina y creció en los últimos años en un promedio de 4.3 por ciento en tanto la región lo hacía en 3.5 por ciento, mientras países considerados desarrollados vivían una crisis.
El jefe de Estado agregó que en su Gobierno más de un millón de ecuatorianos han dejado de ser pobres, y recalcó que vencer la pobreza debe ser el “imperativo moral” del planeta.
Rechazó las “aberrantes” diferencias en la concentración del ingreso en la región que impiden “una vida digna” a la población y se declaró “orgulloso” de ser el país “que más reduce desigualdad” en América.
Rafael Correa dijo tener “sano orgullo” de estar a la vanguardia en políticas de inclusión de personas con discapacidad y reconoció la labor en ese campo del ahora ex vicepresidente Lenín Moreno, en silla de ruedas hace una década tras recibir un disparo durante un asalto.
Correa, un economista con estudios en Estados Unidos y Bélgica, juramentó en un acto al que asisten los gobernantes de Bolivia, Colombia, Chile, Costa Rica, Haití, República Dominicana y Georgia, y varios vicepresidentes, como los de Argentina y Cuba.
Llegó a la Presidencia de Ecuador en enero de 2007, al ganar la segunda vuelta electoral en noviembre de 2006 a Álvaro Noboa con 56.6 por ciento de los votos.
Tras la puesta en marcha de una nueva Constitución Política, Correa se presentó de nuevo a las elecciones presidenciales de abril de 2009, las que ganó en primera vuelta con 51.9 por ciento de los sufragios.
En febrero pasado se realizaron nuevos comicios presidenciales, los que fueron ganados por Correa, de 50 años de edad, con 57.1 por ciento de los votos en una fórmula donde lo acompañó Glas como vicepresidente.
Figura prominente de la izquierda latinoamericana y quien ha anunciado su retiro de la actividad política en 2017, gobernará por primera vez con una mayoría absoluta en el unicameral Parlamento, tras obtener el oficialismo 100 de los 137 curules en los comicios del pasado 17 de febrero.
Eso le permitirá sacar adelante una serie de reformas mineras, agrarias, penales, de seguridad social y una ley de comunicación rechazada por los grandes medios, con los que sostiene un duro enfrentamiento acusándolos de intentar desestabilizarlo.
Gabriela Rivadeneira dijo en el acto que “está en camino la revolución ciudadana, la revolución de los pobres”, y valoró la reducción de la pobreza extrema, la cual será en el futuro “un triste recuerdo”.
La legisladora recordó a los tres millones de ecuatorianos que salieron de su país a partir de la década de los años 90 en busca de mejores horizontes económicos y que ahora “hacen cola en la fila de la esperanza para retornar”.
Indicó que “hace seis años llegó a Ecuador un nuevo pensamiento, un nuevo sueño, una nueva utopía”, en alusión a la llegada al poder de Correa en 2007, quien permitió que Ecuador sea hoy “una patria nueva y soberana”.
Rivadeneira rindió un homenaje al ex vicepresidente Lenin Moreno, quien impulsó una política de gobierno a favor de los 130 mil ecuatorianos con capacidades diferentes
Moreno fue ovacionado de pie por los asistentes a la Asamblea Nacional.
Tras el acto protocolario, Correa encabezará una “posesión popular” en las instalaciones del antiguo aeropuerto de Quito, hoy convertido en parque.
Allí se presentarán varios cantantes y grupos musicales, como el puertorriqueño Calle 13, frente a miles de partidarios, según el secretario del movimiento oficialista Alianza País, Galo Mora.
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